Una de las entidades reguladoras de Japón, la Agencia de Asuntos del Consumidor de Japón (CAA, por sus siglas en inglés), reveló en uno de sus informes que las quejas relacionadas con las criptomonedas aumentaron un 69% en comparación al 2017, llegando a los 3.657 casos registrados.
Aunque hubo un claro incremento general de esta cifra, la institución también acotó que el crecimiento interanual en el número total de quejas ya había presentado una disminución en el 2018 a 1.7x, a pesar que los años anteriores, por el contrario, habían incrementado en un 3.5x, de acuerdo a los datos de la CAA.
Con el incremente en el número de quejas, varios analistas y expertos del ecosistema criptográfico han asegurado que también hay un aumento en la popularidad de las monedas digitales, considerando a los reclamos como un indicador de la misma.
De hecho, afirman que en 2018, durante el prolongado mercado bajista, aumentaron las quejas y la popularidad de los activos digitales. ValuePenguin, una firma de investigación de consumidores, emitió un informe que mostraba que la caída a principios de ese año en los precios de las criptomonedas provocaron un aumento en las quejas de los consumidores en los Estados Unidos.
Otro elemento que se revela con los reclamos es la cantidad de preguntas que tienen los consumidores respecto a las monedas digitales. De acuerdo con la CAA, las quejas contenían dudas sobre varias facetas del mercado criptográfico.
Entre las principales preguntas se encuentran las relacionadas con la privacidad, reembolsos en caso de problemas con la plataforma y la interfaz de usuario en algunos intercambios.
Una de las quejas más preocupantes fue que algunos comerciantes aseguraban haber encontrado a ciertas casas de cambio que se comportaban de forma fraudulenta, utilizando publicidad falsa, retención de depósitos de clientes o no entregar las criptomonedas compradas a sus clientes.
Esto encendió las alarmas de la Agencia de Servicios Financieros (FSA, or sus siglas en inglés), la cual muy probablemente una esfuerzos con la CAA para investigar estos casos, tal y como lo han hecho en ocasiones anteriores.
En líneas generales, la mayoría de las quejas que recibió la institución japonesa tenían que ver con el comercio de altcoins, reduciendo cada vez más la cantidad de preguntas relacionadas con la criptomoneda más famosa de todas, Bitcoin.
