Aún no ha sido aprobado ningún ETF de Bitcoin en los Estados Unidos, debido a las continuas negaciones por parte de los reguladores. Sin embargo, los intentos no desaparecen.
Ahora el destacado inversor en Tecnología ARK Invest realizó una alianza con 21 Shares para presentar a la SEC un Exchange Traded Fund (ETF) basado en Bitcoin.
Esta solicitud de aprobación se une a una lista de decenas de empresas que esperan que finalmente sea este 2021 el año cuando la SEC apruebe el primero de estos instrumentos basados en criptomonedas.
La experiencia de 21 Shares en creación de productos criptográficos comerciados en bolsa (ETP), principalmente en Europa, espera hacer realidad la llegada de un ETF en Estados Unidos.
En los últimos años, el ente regulador de la bolsa de valores estadounidense ha denegado docenas de propuestas de ETF basados en BTC.
¿Qué es un ETF de Bitcoin?
ETF son las siglas en inglés de exchange traded fund, lo que se traduce como fondo de inversión.
Para ser más precisos, un ETF es un fondo indexado que replica otros índices de referencia, tales como el S&P 500 o el Dow Jones.
Cuando adquieres un ETF no compras una acción en sí, sino más bien el valor del índice o activo al que está anclado.
Fueron comenzados a usar en 1976 para imitar el comportamiento del S&P 500. Debido a la eficiencia y comodidad que ofrecen, la adopción de este tipo de instrumentos ha crecido a gran velocidad, adaptándose a distintos segmentos del mercado de valores.
Un ETF de Bitcoin utilizará lógicamente el precio del Bitcoin como referencia, por lo que replicará la fluctuación de este.
Este tipo de instrumentos se encuentran regulados, por lo que podrían ser comprados en mercados tradicionales tales como el NASDAQ o el NYSE, y no en exchanges de criptomonedas.
¿Por qué es tan importante que un ETF basado en crypto sea aprobado?, simple. A pesar de que puedas pensar que gestionar Bitcoin es una tarea sencilla, realmente para las grandes instituciones no lo es tanto.
Piensa que Goldman Sachs en caso de querer comprar BTC querría adquirir probablemente algunos miles de millones de dólares. Agarrar esa cantidad de dinero y simplemente transferirla a un monedero tipo hardware no parece demasiado viable para esa institución.
Las grandes instituciones operan de forma muy distinta a los inversores individuales, pues tienen que cumplir con complejos marcos regulatorios para poder gestionar el dinero.
Un ETF ya haría gran parte del trabajo de custodia y cumplimiento de marcos legales. Logrando así abrir paso a la adopción de muchos grandes inversores.
