Los fraudes en el mundo de las criptomonedas son un negocio millonario y muy extendido en todas partes del mundo. Estas actividades criminales son variadas y cuentan con sofisticadas herramientas, tanto en el campo técnico como en el psicológico. Miles de millones de dólares del sector cripto van a parar cada año en las carteras de los estafadores.
¿Existe algo que se pueda hacer para evitar esta situación? La seguridad es un tema que muchos proyectos cripto se toman en serio para prevenir los fraudes y las estafas. Sin embargo, la capacidad de adaptación de los delincuentes no conoce límites. Además, sus objetivos no son personas con conocimientos, sino aquella parte de los usuarios más ingenuos, generalmente nuevos en el sector cripto.
Aunque muchas empresas invierten millones de dólares para prevenir los fraudes en el mundo cripto, los resultados no son los esperados. Actualmente, las esperanzas de solución se centran en la tecnología de la Inteligencia Artificial (IA). ¿Es posible que esta tecnología comience a marcar la diferencia?
Las criptomonedas son ideales para cometer fraudes
La naturaleza descentralizada, la mayor ventaja de las criptomonedas, es paradójicamente una de las principales herramientas para los fraudes. Muchos proyectos en el mundo cripto se crean de manera anónima (desde el propio Bitcoin), lo que supone una invitación para los delincuentes. En el mercado particular de las finanzas descentralizadas no son pocos los casos de fraudes de tipo rug-pull, solo por nombrar una modalidad.
Numerosos proyectos nacen con la finalidad de acaparar los fondos de los usuarios y luego marcharse al amparo del anonimato de las DeFi. Esta situación genera malestar entre las autoridades de muchos países, pero es poco lo que pueden hacer, al menos hasta ahora.
Regular un sector descentralizado y con decenas de proyectos con anónimos detrás es una tarea compleja para los entes gubernamentales. En ese sentido, cuando uno de estos proyectos huye con los fondos de los usuarios, las autoridades hacen intentos a ciegas de cacería. Así, las víctimas tienen pocas esperanzas de recuperar sus fondos.
Como ya se mencionó, existen numerosas formas y variedades de fraudes dentro del mundo de las criptomonedas. La actividad puede surgir desde los propios proyectos, hasta externos que se suplantan identidad. Se trata de un entramado complejo a la hora de desenmarañar.
Los tipos más comunes de actividad fraudulenta en el sector cripto
Aunque existen muchos tipos de fraudes dentro del sector cripto, un puñado de estrategias se destacan al ser las más efectivas. La primera de ellas es la denominada estafa de inversión, la cual es en gran medida descrita arriba. Los delincuentes presentan un supuesto proyecto en apariencia bien estructurado. Cuando alcanzan el objetivo planteado, desaparecen con los fondos.
La segunda forma popular es la denominada suplantación de identidad. Esta consiste en robar los datos personales para acceder a cuentas y hacer transferencias.
El malware y phishing también son muy comunes y consisten en ataques informáticos para tener acceso a los datos de usuarios. Por ejemplo, los enlaces desconocidos o los mensajes de correo electrónico que viene con programas maliciosos.
Una vez consumados los robos de criptomonedas, los delincuentes concretan los fraudes mediante el proceso de lavado de dinero. Este es uno de los puntos más sencillos y consiste en enviar fondos a carteras no custodiadas desde direcciones VPN. Existen formas mucho más simplificadas con el uso de plataformas como Tornado.
La IA y las herramientas de prevención del fraude
En este punto es cuando aparece la nueva tecnología de la IA como una salvación para evitar que los estafadores sigan cobrando víctimas. Hasta ahora, la IA está en sus primeros pasos a la hora de crear una defensa hermética frente a diversos tipos de fraudes.
No obstante, ya existen algunas herramientas con notables efectos y que pueden ser de gran ayuda. En primer término, se cuentan las herramientas de análisis de datos. Puntualmente, los algoritmos de aprendizaje tienen la capacidad de analizar gran cantidad de información de los que pueden identificar patrones y comportamientos sospechosos.
Otra de las capacidades es la detención de anomalías en cuanto a posibles transacciones ilegales o sospechosas. Así, las posibilidades de evitar que se concreten los fraudes aumentan con estas detecciones inmediatas.
Entre los aspectos más importantes de estas herramientas se cuenta la identificación de identidad. La biometría o datos digitales pueden permitir que se identifique a un usuario real de uno falso. Con ello se puede evitar la suplantación de identidad.
Aunque este tipo de técnicas existen desde hace tiempo, la diferencia con la IA es que les imprime mayor eficiencia, precisión y adaptabilidad. De este modo, se puede decir que los fraudes en el mundo de las criptomonedas podrían disminuir radicalmente con la evolución de la IA.
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