La Unión Europea planea crear plantas robots tras la creación de un gran proyecto que permitirá crear edificios verdes.

El objetivo de este proyecto es desarrollar e investigar relaciones simbióticas estrechamente vinculadas entre robots y plantas naturales y explorar los potenciales de una sociedad (robot-planta) capaz de producir artefactos arquitectónicos y espacios de vida.

Se crearán una serie de robots híbridos que funcionarán como un sistema cognoscitivo encarnado, auto organizado y distribuido. El sistema crece y se desarrolla durante largos períodos de tiempo en la interacción con los seres humanos dando lugar a la creación de estructuras arquitectónicas significativas.

El objetivo de la investigación es ver hasta dónde puede llegar la idea de bio-híbridos de planta y robot las sociedades serían la base para llenar ciudades más verdes.

Las ciudades se expanden  y las áreas verdes parecen desaparecer cada vez más una alternativa a esto es colocar plantas-robot que se adapten al entorno de las ciudades y que puedan ser capaces de crecer en los edificios.

Las “plantas artificiales” apoyan y controlan las plantas biológicas a través de andamios, riegos y estímulos adecuados. La planta natural, a su vez, soporta y controla la planta robótica guiándola mediante el crecimiento (por ejemplo, hacia la luz) y soportando el peso del robot en fases de crecimiento posteriores.

Las plantas artificiales se construyen a partir de pequeños módulos heterogéneos de detección y actuación conectados mediante elementos de construcción ligeros. Cada planta robótica se conecta de forma inalámbrica a Internet. Los robots y las plantas crecen juntos desde el brote hasta la etapa adulta y forman un sistema estrechamente co-dependiente y auto-organizado.

Los organismos robot-planta viven en un ambiente humano-habitado y sirven como estructuras arquitectónicas a los seres humanos (por ejemplo, paredes, techos, bancos) proporcionando funcionalidad como sombra, control de calidad del aire y alivio del estrés.

El uso de bio-híbridos y ciudades verdes

Para esto se uniria la capacidad natural de las plantas con la dirección de los robots tomando asi las mejores decisiones. Por ejemplo: un bio-híbrido podría ser capaz de crecer partes de su cuerpo para captar los rayos del sol.

En un futuro se podría disfrutar de una arquitectura urbana donde se pueda cultivar frutas y verduras cerca de los edificios con enormes jardines verticales.

Flora robótica es un proyecto de cuatro años financiado en el marco de la Acción Proactiva de la UE y las Tecnologías Futuras y Emergentes Horizonte 2020. El proyecto se extiende desde abril de 2015 hasta marzo de 2019. Es una buenas visión a futuro, cultivando una ciudad verde, pero por lo pronto habrá que esperar el desarrollo de este proyecto.

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