Los resultados electorales en Argentina sacudieron los mercados de arriba a abajo. Y es que, luego del triunfo de la fórmula Fernández-Fernández este domingo 11 de agosto, la reacción del mercado financiero no se hizo esperar, derrumbando el valor del peso argentino.
Este llegó a venderse por 60 pesos el dólar, no habiéndose recuperado hasta el día de hoy, cotizando a 54,82 pesos por dólar en el mercado mayorista, y a 57 pesos en bancos minoristas al momento de la redacción de este artículo, una pérdida de más de un cuarto de su valor.
La victoria electoral ocurrida en las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO), proceso previo a las elecciones presidenciales del mes de octubre, en el cual las plataformas políticas presentan a sus pre-candidatos presidenciales, para así elegir quien representará definitivamente a cada tolda política en las elecciones, y qué candidatos obtienen la votación mínima para participar del 1,5%.
En la jornada electoral el candidato kirchnerista Alberto Fernández, habría obtenido un 47,7% de los votos frente a tan solo un 32,1% del actual presidente Mauricio Macri. Este resultado encendió las alarmas de los capitales financieros argentinos, al recordar las medidas intervencionistas impulsadas por los gobiernos kirchneristas previos al triunfo de Macri, aún más cuando la compañera de fórmula de Alberto Fernández es la propia ex Presidente Cristina Fernández de Kirchner.
Rápidamente, los argentinos han corrido a intentar proteger sus ahorros cambiando sus pesos a otros activos que proporcionen seguridad en tiempos de volatilidad en los mercados. Esta es la reacción común de los consumidores frente a depreciaciones agresivas de sus monedas locales, lo que sin duda es novedoso en este caso es que las únicas opciones disponibles para los argentinos no fueron los activos seguros tradicionales, el oro y el dólar, sino que también entró al escenario un nuevo actor: el Bitcoin.
Los Bitcoins han venido poco a poco obteniendo un mayor peso en la mente de los inversionistas como activos refugio de valor. Y es que, con el paso de los años, la criptomoneda ha demostrado que sus caídas de valor no están directamente relacionadas con la inestabilidad en los mercados financieros. Al contrario, frente a la inestabilidad política y económica, lo normal es que aumente la demanda de Bitcoins y por tanto su precio en el mercado.
Esto ha incentivado en esta coyuntura la adquisición por parte de los ciudadanos argentinos de Bitcoins, como una forma para protegerse de la depreciación del peso, teniendo a su favor además la existencia de múltiples exchanges con los cuales trabajar directamente en pesos para adquirir BTC.
Así, la exchange dedicada específicamente al mercado argentino, Ripio, observó a lo largo de la semana un aumento en el precio del Bitcoin en termino de pesos argentinos, explicado por una parte debido a la fuerte depreciación de la moneda, pero también teniendo su origen en un fuerte aumento de la demanda de Bitcoins, lo que ha servido para impulsar la recuperación del precio de la criptomoneda.

Además, a lo largo de toda la semana, las transacciones entre Bitcoins y pesos argentinos han funcionado con un alto spread, es decir con una alta diferencia entre el precio de compra y de venta de los Bitcoins. A día de hoy, el precio de compra de BTC en Ripio es de 612.467,51 pesos por dólar, mientras que el de venta es de tan solo 537.720,80 pesos por dólar.
Este tipo de situaciones son comunes en mercados con alta volatilidad, debido la desesperación de los usuarios por adquirir un activo que proteja el valor de su dinero (los Bitcoins), lo que permite a los exchanges establecer tasas abusivas y lucrar gracias al contexto político.
Así, spreads como este no son comunes en otras plataformas que no se dedican exclusivamente al mercado argentino, como Binance, una importante alternativa para los ciudadanos del país sudamericano, en un momento cuando la incertidumbre política los ha ido llevando cada vez más a confiar en el BTC como refugio para su capital, influyendo además en el mercado global de criptomonedas en el proceso.