Blockchair actualizó su política de privacidad recientemente. Los usuarios que se conectan al sitio no tendrán información que se pueda usar fácilmente para identificarlos como dirección IP, especificaciones de la computadora, agente, etc., almacenados permanentemente.
La compañía también afirma no usar cookies de identificación, entre otras medidas de seguridad. Es una diferenciación interesante como modelo de negocio en un mercado cada vez más competitivo, y la privacidad sigue ocupando un lugar destacado en la comunidad de las criptomonedas.
“Podrían vender esta información, publicarla, compartirla con agencias gubernamentales o podrían ser pirateadas”, dijo Blockchair a su competidores que no brindan suficiente protección de la privacidad, en su opinión, a los usuarios.
“Si se hace público que tienen importantes fondos almacenados en la criptos, es probable que seas un blanco de los delicuentes cibernéticos. Su seguridad personal también puede estar en riesgo”.
Entre las muchas ventajas de lo que se conoce como efectivo está su relativo anonimato. Además del país de origen en el mundo fiduciarios, el intercambio no determina las características distintivas de un comprador o vendedor.
Las personas criadas en medios legados verán de inmediato las transacciones anónimas como sospechosas. Si uno tuviera curiosidad por el comercio, al menos se alejaría de la escena con una impresión y una asociación muy reales: el efectivo es igual al anonimato y el crimen.
Para las propiedades un poco más consideradas y serias de la privacidad pueden ser asuntos de vida o muerte, ya sea de manos de pequeños delicuentes, incluso de gobiernos corruptos o peores.
Una de las ventajas claves de las criptomonedas es que permiten transacciones pseudo anónimas. En la mayoría de los casos, la dirección del usuarios y los detalles de la transacción se hacen públicos y no se pueden eliminar, pero su identidad personal permanece desconocida si no existe un vínculo entre el usuario y sus datos de la cadena de bloques, explicó Blockchair.
Los exploradores de bloques permiten buscar cadenas de bloques. Las direcciones criptos públicas pueden ser rastreadas, incluyendo transferencias y confirmaciones. Cada cadena requiere su propio explorador o navegador dedicado, Blockchair es un motor de búsqueda de BTC, BCH, LTC, ETH y BSV. Los bloques recientes, los enlaces a cada transacción, el número de transacciones y los historiales de saldo son solo algunos de los usos.
La actualización de la política de privacidad de Blockchair explica cómo los sitios monitorean a los usuarios, y se abrirá a los nuevos en el espacio. La mayoría de los principales exploradores de bloques aunque emplean frases como “política de privacidad”, el lenguaje a menudo es confuso y no está claro.
La mayoría de los exploradores de Blockchain y las compañías de criptomonedas almacenan información de los usuarios, incluidos los saldos disponibles, las listas de transacciones y los tipos de criptomonedas, señala Blockchair.
