El halving es un evento automático de la red de Bitcoin que afecta de manera directa a las empresas que se dedican a la minería. En el largo plazo, estos recortes cuatrianuales ayudan a que el precio de la moneda digital pionera mantenga la trayectoria alcista, dado que generan escasez.
El objetivo del halving es reducir a la mitad la recompensa que entrega la red a los mineros por cada bloque de transacciones procesado. Esto quiere decir que luego del recorte del próximo año 2024, la recompensa ya no será de 6,25 BTC por bloque, sino 3,125 BTC.
Esto provoca una reducción drástica del flujo de monedas nuevas al mercado, lo que llevará a la escasez y a la subida del precio. Debe considerarse que Bitcoin tiene una emisión tope de 21 millones, lo que quiere decir que, con el pasar del tiempo, su precio será mayor. Se trata de una situación muy conveniente para el balance de las empresas mineras y para los holders.
Impacto del halving en la minería de Bitcoin en el corto plazo
Si bien el efecto de los recortes en el largo tramo es altamente positivo para las empresas, en el futuro inmediato el asunto es distinto. Las empresas de minería de Bitcoin enfrentan la realidad de recibir solo la mitad de lo que recibían antes del halving y por ello evalúan nuevas estrategias.
En otras palabras, las firmas del sector enfrentan la realidad de recibir menos ingresos para mantener sus operaciones. A esto se suma el constante aumento de los precios de la energía en algunas regiones. En consecuencia, recibir menos y con un aumento constante de los gastos operativos será fatal para muchas empresas.
Esto las empuja a adoptar nuevas estrategias para cubrir el vacío que dejará el -50% en el corto plazo. Eso es lo que plantea el experto en minería digital, Anthony Power. Consultado en el portal The Block asegura que algunas de las opciones son adquirir GPU para operar centros de datos para compañías de inteligencia artificial.
«Si eres minero de bitcoins y extraes en un lugar donde obtienes energía realmente barata, seguro estás pensando, si el precio de BTC baja, necesito ingresos que no se vean afectados por el precio de Bitcoin», expresa.
Bajo esta presión se encuentra ahora la industria de la minería de Bitcoin y las empresas evalúan seriamente los nuevos pasos.
Varias empresas ya están diversificando sus fuentes de ingresos
Para cualquiera que conozca medianamente el tema, se hace evidente que este no es un buen momento para una empresa minera. La volatilidad que enfrentará el sector podría ser la causante de muchos problemas para la industria. Vale la pena mencionar que las acciones de las firmas mineras que cotizan en la bolsa están en pleno retroceso desde mediados de julio.
Por ejemplo, el fondo Valkyrie Bitcoin Miners ETF, que brinda exposición a estas compañías, tiene un saldo de -23% en septiembre. Aunque la mala situación de este segundo semestre de 2023 se puede calificar como una corrección luego de un primer semestre de grandes subidas, no se debe obviar el año 2022. Los sucesos del año pasado desataron un agudo mercado bajista que llevó a la quiebra a numerosas empresas.
Considerando esta situación delicada, el citado experto expresa que algunas empresas, como Hut8, Hive Digital e Iris Energy, ya están dando los pasos necesarios. Las directivas de estas firmas estarían comprando GPU o utilizando las tarjetas GPU con las que minaban Ether para ponerlas a operar centros de datos.
Power agrega que, en sus infraestructuras, las empresas de minería de Bitcoin cuentan con todos los elementos para ejecutar centros de datos. Por ejemplo, afirma que están ubicadas en zonas frías o con bajos precios de energía y, además, cuentan con la capacidad de refrigeración necesaria.