Noticias

“Debemos protegernos de los riesgos emergentes sin sofocar la innovación”, aseguró presidenta del FMI

La presidenta del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, ha vuelto a pronunciarse a favor de la innovación y las tecnologías disruptivas, como las criptomonedas, Inteligencia Artificial y los servicios financieros o Fintech. En esta oportunidad recalcó que, aunque las regulaciones son importantes, las autoridades competentes debían asegurarse que estas no sofocaran la innovación ni el progreso.

single-image

La presidenta del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, ha vuelto a pronunciarse a favor de la innovación y las tecnologías disruptivas, como las criptomonedas, Inteligencia Artificial y los servicios financieros o Fintech. En esta oportunidad recalcó que, aunque las regulaciones son importantes, las autoridades competentes debían asegurarse que estas no sofocaran la innovación ni el progreso.

“En el siglo XIX, cuando se le otorgó a Alexander Graham Bell una patente para el teléfono, la única forma de comunicarse rápidamente a través de largas distancias era por telégrafo. La empresa dominante en ese mercado descartó la invención de Bell como un juguete inútil y rechazó la oportunidad de comprar su patente”, comenta Lagarde.

La presidenta del FMI cuenta esta historia para explicar que siempre ha existido un rechazo por parte de las empresas dominantes a las tecnologías totalmente nuevas. Ya sea porque no las entienden o porque tienen miedo que esa invención los saque del mercado, así que prefieren cerrarle las puertas para evitar el peligro.

Una historia similar ocurre hoy con las criptomonedas; mientras unos los consideran la nueva forma de hacer transacciones económicas, otros los califican como una simple moda o un fraude. Pero, Lagarde dice que “no deberíamos descartarlos tan a la ligera” si no queremos que suceda lo mismo que a las empresas de telégrafos y Bell.

Los criptoactivos han sido de bastante utilidad en varios países, ya sea para traer a personas no bancarizadas al sistema financiero o para apoyar a pequeñas empresas con créditos que se los bancos les habían negado. Además, estas nuevas tecnologías permiten realizar transacciones mucho más rápidas y baratas.

Sin embargo, a pesar de los beneficios que puedan ofrecer, es innegable que existen riesgos. Estas tecnologías se han utilizado para realizar actividades ilícitas en más de una ocasión, es por ello que las autoridades competentes empiezan a colocar leyes estrictas para regularlas.

Pero los reguladores no tienen una tarea fácil. Por un lado, deben proteger a los consumidores e inversionistas contra el fraude, combatir el lavado de dinero, financiación del terrorismo y evasión fiscal, además de mantener la estabilidad del sistema financiero.

Por otro lado, deben tener cuidado de no entorpecer el avance de innovaciones que benefician de forma responsable y sostenible al público. Para Lagarde, lo mejor que pueden hacer los reguladores es comprometerse constructivamente con los participantes del mercado de innovación financiera, mantenerse al tanto de los beneficios de las nuevas tecnologías, para así poder identificar rápidamente los riesgos emergentes.

“Desarrollar un marco normativo con visión de futuro requiere creatividad, flexibilidad y nueva experiencia”, aseguró Lagarde.

Hasta ahora, las autoridades nacionales de cada país han actuado con distintos grados de rigor reglamentario. Si esta respuesta descoordinada continúa, la actividad criptográfica simplemente migrará a jurisdicciones menos reguladas. Por ello, un esfuerzo mancomunado entre los Estados es tan importante.

Hasta ahora, ha habido varios esfuerzos para realizar esta tarea, como el Grupos de Acción Financiera, un organismo mundial que ya ha orientado a sus miembros sobre cómo deben abordar los riesgos relacionados con criptomonedas.

También el Consejo de Estabilidad Financiera, quien coordina la regulación financiera para las economías emergentes más grandes del mundo, mejor conocidas como el G-20, está estudiando formas de controlar el crecimiento de las monedas digitales, con el objetivo de identificar amenazas emergentes hacia la estabilidad económica. Sin embargo, estos esfuerzos aún no han arrojado resultados concretos.

Para concluir, la presidenta del FMI asegura que “debemos mantener una mente abierta acerca de los criptoactivos y la tecnología financiera de manera más amplia, no solo por los riesgos que plantean, sino también por su potencial para mejorar nuestras vidas. En caso de duda, solo piense en Alexander Graham Bell y su teléfono”.

Deja un comentario

Loading data ...
Comparison
View chart compare
View table compare