Este jueves, se ha producido un nuevo ajuste en la red que disminuye considerablemente la dificultad para minar Bitcoin. El ajuste ha alcanzado el nivel de 13,7 billones, equivalente a una disminución del 9,29%.
Con este porcentaje alcanzado, el nivel de dificultad se redujo de manera similar al de enero de este año. Además, se ubica en el octavo puesto de niveles más bajos de la historia de esta criptomoneda. Es importante destacar que, el 27 de marzo y 20 de mayo, se produjeron dos reducciones respectivas de dificultad.
¿Qué significa una reducción de dificultad para minar Bitcoin?
En palabras sencillas, la caída de la dificultad, significa que es más fácil minar Bitcoin. Cada 2.016 bloques minados (lo que equivales a dos semanas aproximadamente), la red automáticamente ajusta su dificultad. El 20 de mayo se produjo el ajuste de -6%, el cual fue el primero de esta nueva etapa posterior al Halving.
Debe recordarse que el Halving recortó a la mitad la recompensa de Bitcoins por bloque minado. Esto, unido a que el precio de Bitcoin no ha aumentado notablemente, ha obligado a los equipos obsoletos a salir de la red.
Otro dato importante sobre este hecho, es que tres caídas consecutivas de dificultad son poco frecuentes en la red. Tanto así, que es apenas la octava vez en la historia de Bitcoin que ocurre. Esto de acuerdo a datos de Sasha Fleyshman, publicados en la red social Twitter.
“Apenas siete veces, desde que Bitcoin se minó por primera vez, se produjeron reducciones consecutivas en la dificultad. (3kw) en noviembre de 2018, (2kw) en noviembre de 2017, (2kw) en diciembre de 2014, (2kw) en diciembre de 2012, (2kw) en mayo de 2012, (2kw) en abril de 2012 y (8kw) en agosto-noviembre de 2011”.
¿Es un hecho positivo o negativo?
En términos generales, se puede asegurar que esta pregunta tiene dos respuestas: positiva y negativa. La primera, es en el corto plazo para los mineros obsoletos, los cuales podrían mantenerse un tiempo más dando ganancias. Por supuesto, esto depende de que el costo de electricidad de su ubicación sea bajo.
En cuanto a los mineros más modernos, como los S17, por ejemplo, la situación es mucho más positiva. En el caso de China, con la temporada de lluvias y la implícita reducción en los precios de electricidad, no podría haber mejor momento para minar.
Es un hecho negativo, por otro lado, si se amplía la perspectiva. Por ejemplo, en noviembre de 2018, fecha de la última baja en la dificultad para minar Bitcoin de manera consecutiva, “El precio del Bitcoin se derrumbó cuando los mineros comenzaron a capitular”, resalta el portal ambcrypto.com.
Durante la anterior reducción de la dificultad, el pasado 20 de mayo, el precio de la criptomoneda retrocedió en -8% y desde entonces se ha mantenido volátil.
El poder total de cómputo sigue subiendo
Mientras, por un lado, la dificultad para minar Bitcoin disminuye, por el otro, su hash rate o poder de cómputo continúa en ascenso.
Esto corresponde a dos hechos principales. El primero, por la ya mencionada llegada de las lluvias a China. En segundo término, por el inicio, desde mayo, del comercio de los equipos de última generación tras la estricta reducción del comercio debido a la pandemia del COVID-19.
Las empresas más importantes de fabricación de hardwares de minería, MicroBT y Bitmain, anunciaron que los cupos de pre orden para los batch de los próximos meses, hasta agosto, están agotados. Lo que indica a que el hashrate seguirá subiendo. Hasta la fecha se ubica en 108.4Eh/s.
Este incremento del poder de cómputo, ha disminuido el tiempo promedio de generación de bloques de 12 a 11 minutos. Esto podría significar que, si continúa incrementándose el has rate y se reduce el tiempo a menos de 10 minutos, el próximo ajuste, programado para el 16 de junio, podría ser un aumento de la dificultad.
