Los denominados NFT, iniciales en inglés para tokens no fungibles, se cuentan entre los elementos con más futuro para el mundo digital. Los mismos son considerados como uno de los vehículos para la estimulación de la circulación de mercancías de las empresas productoras en ambientes virtuales.
En 2021 se dieron a conocer estos coleccionables entre el mundo de la moda y el arte. Decenas de famosos del deporte, el cine, farándula y otros sectores sacaron sus propias colecciones. Lo mismo cabe decir de muchas empresas, las cuales aprovecharon sus productos insignia para explotarlos digitalmente.
Pero a esto no se limita el asunto de estos coleccionables blockchain. Aunque el presente los convierte en elementos que se hacen cada vez más importantes, es el mañana el que les dará su verdadero lugar. Esto se resume a una de las palabras más prometedoras entre los entusiastas del mundo de la tecnología: el metaverso.
El futuro de los NFT para la interacción social digital
El futuro de la tecnología y de los NFT está estrechamente vinculado en las necesidades de los consumidores. Estos coleccionables pueden patentar la originalidad de cada producción gracias a la cadena de bloques. Y no solamente se trata de productos, sino también de servicios.
Por ejemplo, algunos clubes deportivos están trabajando en crear colecciones basadas en conquistas de campeonatos para alimentar la nostalgia de los fanáticos. Prácticamente, todo se puede digitalizar y patentar gracias a estos coleccionables basados en la blockchain. Naturalmente, esto genera grandes expectativas por parte de los usuarios y los inversores.
El desarrollo de la utilidad de este tipo de producto permite que se conviertan en un mercado capaz de soportar fuertes sacudidas macroeconómicas. Tal es el caso de 2022, un año en que los mercados financieros se fueron al piso debido a las condiciones de altas tasas de interés en EE.UU. Ese mismo ambiente llevó a las monedas digitales a una caída escandalosa. Sin embargo, los entusiastas del mercado NFT tienen motivos para sentirse optimistas.
Pese a que el mercado tuvo una importante reducción por la caída del interés, sus números se mantuvieron robustos mientras otros activos experimentaban ventas masivas. Se trata de una situación que habla muy bien del futuro que espera a los NFT, tanto para las actuales como para las venideras generaciones.
Un aspecto a considerar es que se trata de un sector muy joven que hasta hace poco pasaba desapercibido para el público. Incluso, dentro del área cripto, un gran porcentaje no comprende o no tiene interés en estos coleccionables.
La compaginación con las nuevas generaciones
Un aspecto esencial de este mercado, es que las nuevas generaciones de nativos digitales lo asumirán como algo natural en sus vidas. En consecuencia, a medida que los más jóvenes (muchos de los cuales no han nacido todavía) se incorporen, lo harán relacionados con los NFT. Se trata de una tendencia que se generalizará con el tiempo, pero que ya se va perfilando actualmente.
Por ejemplo, estudios muestran que las personas de la denominada Generación Z son más proclives a invertir en el sector cripto que las anteriores generaciones. También entran en esta ecuación los denominados millennials, quienes también invierten grandes cantidades en criptomonedas, NFT y blockchain, pero conservan gran inclinación por el mercado de acciones. En contraste, los más jóvenes ven el mundo de las finanzas tradicionales como algo corrupto, anticuado y elitista.
Gracias a la blockchain y su tecnología, estos coleccionables vienen con la pizca de transparencia y propiedad que se necesita. Para las personas jóvenes, no existe comparación y, a menos que sea una oportunidad muy ventajosa, no colocarán las acciones por encima de las criptos. Las decepciones de 2022 no se traducen en un abandono de estas tecnologías de inversión, sino una pausa de los inversores a la espera del próximo boom.
La proyección a futuro de los NFT y la preferencia de la Gen-Z fue inmediatamente captada por muchas empresas de todos los tamaños. De allí que muchas firmas dieran el salto, no solo a los coleccionables, sino también a las criptomonedas, a las finanzas descentralizadas y a la cadena de bloques en trazos generales.
El Metaverso y los coleccionables Blockchain
Pero si hay algo que le dará el mayor de los impulsos al mundo de los tokens no fungibles, es el Metaverso. Ese mundo digital de plataformas interconectadas que llevará la interacción social hacia nuevos límites, es uno de los más esperados. Miles de millones de dólares se posan sobre las empresas que están desarrollando la tecnología que hará posibles los metaversos.
Esas plataformas tendrán cualidades de emular y, hasta cierto punto, complementar el mundo material. El hecho de que millones de personas tendrán vida social en ellas, es decir, trabajo, juegos, turismo, educación y más, hizo surgir algunas interrogantes. Entre ellas se destaca, la autenticidad de la propiedad. En el mundo real, las cualidades de la materia (movimiento, masa, peso, etc.) les permite conformar objetos. No obstante, en el Metaverso el asunto es más complejo, pero los NFT vienen a llevar las cualidades que requieren los objetos del mundo digital.
Millones de mercancías circularán por las plataformas (incluso perfumes) que usarán los avatares que representan a los usuarios. Desde coches, armas, zapatos e implementos deportivos hasta cremas para la piel y relojes serán comerciados por los avatares. La blockchain permite otorga una firma de irrepetibilidad a cada uno de esos productos.
De ese modo, difícilmente se puede imaginar un futuro del Metaverso sin los NFT. Tal como ha reportado este medio, decenas de empresas ya tienen sus productos inscritos como patentes para tokens no fungibles que se adapten al público consumidor del mañana.
Algunas murallas por superar por los NFT para conquistar el futuro
Pero el hecho de que los coleccionables Blockchain tengan una ventana de grandes dimensiones hacia el mañana no significa que se trate de camino limpio. Al contrario, el mercado todavía tiene grandes desafíos ante sí y muchos de ellos, como los reguladores, son imponentes. No obstante, las posibilidades de éxito son mayores a lo contrario.
Pero quizá uno de los mayores obstáculos en este momento es el salto mayúsculo a la adopción. Esto tiene que ver con la llegada al público amplio, lo cual es algo con lo que las criptomonedas todavía sueñan y que el Internet tardó años en conquistar. Para dar ese paso a una nueva etapa, el mercado de tokens no fungibles debe pasar por muchas evoluciones.
En otras palabras, se trata de convertirse en algo más digerible y de fácil acceso para que las personas puedan acceder sin mayores complicaciones. Para las criptomonedas, el asunto comienza a tomar forma gracias a las plataformas de comercio centralizadas o exchanges. Más allá de los escándalos y los peligros, estos permitieron que el comercio cripto alcanzara niveles que de otra manera hubieran requerido más tiempo.
En todo caso, el futuro de los NFT será algo cualitativamente distinto al de ahora. Probablemente, la forma actual de acceso a estos coleccionables mañana será vista como algo arcaico.
