Una noticia más que lamentable relacionada con las criptomonedas, ocurrió reciente en Sudáfrica. Un comerciante de bitcoins sudafricano tuvo que descubrir en carne propia, el riesgo de poseer algo de valor. El hombre, presuntamente llamado “Andrew” recientemente fue víctima de un crimen de criptomoneda en Soweto, Johannesburgo.
Según fuentes locales, el hombre fue atacado por una banda criminal. Al parecer el desafortunado hombre fue invitado a hacer una presentación sobre criptomonedas.
Ingresó a dar la presentación en una residencia que tenía 4 hombres y 2 mujeres. Alguien detrás de él se acercó sigilosamente con un paño impregnado de drogas lo presionó a su cara hasta que se desmayó.
Después de ser secuestrado y torturado, la víctima finalmente transfirió alrededor de 15 bitcoins o unos 800,000 ZAR (US $ 59,000) en BTC y otra suma de aproximadamente US$ 7,400 mediante transferencia bancaria. Además, los secuestradores tomaron sus dos iPhones y dos computadoras portátiles junto con dinero en efectivo que poseía en ese momento, antes de dejarlo en un camino aleatorio
El informe de la policía local, señaló además que los criminales forzaron a la víctima a darles la información de su cuenta de FNB y también la contraseña de su billetera de Bitcoin .
Andrew actualmente recibe atención por las lesiones que sufrió en la Unidad de Cuidados Intensivos del Alberton Union Hospital. Tiene varias quemaduras en las manos, las piernas y el torso causados por la tortura de hierro que soportó. Se está llevando a cabo una investigación para identificar a los atacantes.
Desafortunadamente no es la primera mala noticia de este tipo, en septiembre de 2018, un conocido empresario sudafricano fue secuestrado por un rescate de 50 BTC. Liyaqat Parker fue devuelto a su residencia después de dos meses de cautiverio.
No hace falta decir que se debe tener mucho cuidado al tratar con contactos desconocidos que se encuentran en línea. Esta advertencia se vuelve aún más importante cuando el propósito de la reunión se relaciona con el dinero.
En los ejemplos mencionados anteriormente, los atacantes estaban conscientes de la participación de la víctima en el espacio de la criptomoneda. Si esta información no hubiera estado tan fácilmente disponible, tal vez podrían haberse evitado por completo.
En términos de seguridad personal con respecto a las criptomonedas, siempre es mejor mantener sus posesiones en secreto. No ventilar lo que posees. Ser demasiado ruidoso acerca de su interés en el espacio o la cantidad de Bitcoin que posee es un grave riesgo para la seguridad.