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Este viernes, la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS) del Departamento del Trabajo de EE.UU. publicará el informe del índice de precios al consumidor (IPC) correspondiente al mes de septiembre. Este dato de inflación es especialmente relevante, ya que será una de las pocas publicaciones oficiales en medio de la actual paralización gubernamental. ¿Podría este indicador desencadenar una nueva caída del precio de Bitcoin?
Los analistas se encuentran divididos respecto a los posibles efectos que tendrá la evolución de los precios sobre el mercado cripto. Sin embargo, predomina una visión pesimista que sugiere que la capitulación de los inversores podría intensificarse.
Para dimensionar lo que podría ocurrir con la principal criptomoneda, conviene observar las proyecciones de los expertos. JPMorgan estima que el IPC básico aumentará 0,30% en términos mensuales, mientras que el IPC subyacente lo hará en 0,39%.
En promedio, las instituciones financieras esperan un incremento de entre 0,39% mensual y 3,1% interanual. Este dato de inflación tendrá una incidencia directa en la próxima decisión de política monetaria de la Reserva Federal. El encuentro del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) está programado para los días 28 y 29 de octubre.
Si la inflación supera las expectativas, es probable que el precio de Bitcoin sufra una nueva corrección en las próximas horas, ya que una lectura más alta podría frenar los planes de recorte de tasas de interés.
¿Se preparan los inversores de Bitcoin para una caída?
Si el dato de inflación de este viernes resulta inferior a las previsiones, podría impulsar un repunte en el precio de BTC. Una inflación en retroceso reforzaría las probabilidades de nuevos recortes de tipos, lo que históricamente ha favorecido a los activos de riesgo.
En este escenario, el BTC podría dirigirse nuevamente hacia los $112.000 o incluso superar ese nivel. Por el contrario, si la inflación se mantiene elevada, el impacto sería bajista. En el contexto actual de alta volatilidad e incertidumbre, resulta difícil realizar una proyección precisa.
En el escenario más negativo -con una inflación significativamente superior a lo previsto- el BTC podría retroceder hasta los $105.000 o menos. En cualquier caso, el rumbo de la criptomoneda parece depender, al menos en el corto plazo, del comportamiento de los precios en la economía estadounidense durante septiembre.
Al momento de redactar esta nota, Bitcoin cotiza nuevamente por encima de los $110.000, con un rendimiento de +1,4% en las últimas 24 horas, según CoinMarketCap. Este leve repunte podría anticipar un escenario favorable, aunque el verdadero impacto solo se conocerá tras la publicación del IPC.
