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El Congreso de Filipinas evalúa una propuesta de ley para crear una reserva estratégica nacional de Bitcoin. De aprobarse, el país se pondría a la vanguardia de la adopción de criptomonedas a nivel estatal y se convertiría en uno de los pioneros globales en este tipo de reservas.

La iniciativa ordena al banco central local adquirir 10.000 BTC y mantenerlos como reserva a largo plazo. Este proyecto fue presentado en junio por el congresista Migz Villafuerte, aunque ha ganado notoriedad en los últimos días dentro de los círculos políticos y legislativos de Manila, la capital del país.

Entre los detalles de la propuesta, se instruye al Banco Central de Filipinas (BSF) a implementar un «cronograma de compra recurrente de BTC», consistente en adquirir 2.000 BTC anualmente durante 5 años.

Con un valor superior a los 1.000 millones de dólares al precio actual de BTC, la reserva estaría legalmente protegida en un fideicomiso por un mínimo de 20 años. Además, se establece que los fondos no podrán ser vendidos, intercambiados ni utilizados, salvo para el pago de deuda gubernamental.

De este modo, Filipinas podría iniciar una estrategia de reservas en Bitcoin que le permitiría afrontar desafíos futuros con mayor solidez.

La reserva de Bitcoin garantiza estabilidad financiera, según la propuesta

De acuerdo con Villafuerte, esta propuesta tiene el objetivo de garantizar intereses nacionales cruciales. Esto incluye posicionar al país con estabilidad financiera al diversificar las reservas en activos de enorme apreciación que aseguran el futuro económico nacional. El congresista califica al Bitcoin como una versión digital del oro y remarca la imponente tasa de crecimiento anual de la moneda.

Otro de los elementos de gran interés de esta propuesta es que se blinda en contra de la corrupción. En consecuencia, impondría al BCF la aplicación de una cláusula de transparencia mediante un programa de pruebas de reservas (Proof-of-Reserves).  

Esto obligaría al gobernador del banco central a publicar informes trimestrales detallados y accesibles al público. En los mismos se incluiría el estado de las tenencias, transacciones y, de manera crucial, el control de las llaves privadas de la reserva. En caso de que se apruebe esta propuesta, en la mitad de una década, el país tendría muchas más monedas que las reportadas por El Salador actualmente. 

Además, como ya se mencionó arriba, se convertiría en una de las primeras naciones del planeta en crear una reserva estratégica de Bitcoin. Cabe destacar que este proyecto espera por el debate en el Congreso filipino, donde se terminará su aprobación o rechazo. En cualquier caso, la propuesta se puede considerar un avance que deja claro que el interés por las criptomonedas es global.

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