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Los precios del café han alcanzado niveles históricos, marcando su punto más alto en casi 50 años. El miércoles, los futuros del café arábico subieron un 4.7 %, alcanzando los $3.23 por libra en Nueva York, mientras que los futuros de robusta en Londres aumentaron un 7.7 % hasta los $5.507 por tonelada. Este incremento anual supera el 70 %, en medio de crecientes preocupaciones sobre la oferta global y nuevas normativas de la Unión Europea.
Factores detrás del aumento
- Cambio climático en Brasil y Vietnam: Brasil, el mayor productor de arábica, sufrió su peor sequía en 70 años, seguida de lluvias torrenciales, afectando el desarrollo de los cultivos. Vietnam, líder en producción de robusta, lleva tres años consecutivos enfrentando déficits de suministro debido a condiciones climáticas adversas.
- Nueva ley de la UE contra la deforestación: Desde enero, la UE exigirá que las importaciones de café no provengan de tierras deforestadas. Importadores europeos han adelantado compras por la incertidumbre en torno a la aplicación de la normativa y posibles retrasos legislativos.
- Estrategias comerciales en EE. UU.: Los tostadores estadounidenses también están acumulando inventarios en respuesta a las promesas del presidente electo Donald Trump de imponer aranceles a productos importados, incluido el café.
Impacto en el mercado y los consumidores
Los tostadores europeos y estadounidenses han entrado en «modo de pánico», exacerbando la escasez de suministros. Según expertos, la presión sobre los precios se mantendrá a medida que los consumidores enfrenten incrementos continuos.
«Los recientes aumentos aún no reflejan el impacto completo de esta última alza. Los consumidores deben prepararse para un dolor financiero mayor», advirtió Carlos Mera, jefe de commodities agrícolas en Rabobank.
Perspectivas futuras
Con las cosechas de arábica en Brasil previstas a la baja para 2025-2026 y una alta demanda en los principales mercados, el equilibrio entre oferta y demanda sigue siendo incierto. Este panorama refuerza las preocupaciones sobre los costos en la industria y su impacto en los consumidores.
El café, una bebida imprescindible para millones, enfrenta una transformación en su cadena de suministro debido a la combinación de fenómenos climáticos extremos y la creciente regulación global.
