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Goldman Sachs prevé un futuro positivo para el mercado bursátil de Estados Unidos, minimizando las probabilidades de una caída significativa a pesar de la incertidumbre electoral.
Los estrategas de la firma, liderados por Andrea Ferrario, mantienen una perspectiva optimista gracias a la fortaleza de la economía estadounidense, que sigue mostrando signos de resiliencia.
Perspectiva de un mercado sólido
Según el equipo de Goldman Sachs, existe solo un 18% de probabilidad de que el mercado bursátil entre en una caída de más del 20% en los próximos 12 meses, el umbral que suele definir un mercado bajista.
Esta perspectiva considera tanto la incertidumbre de las elecciones presidenciales como los desafíos económicos a corto plazo. Ferrario y su equipo destacan que la economía resistente sigue siendo el principal soporte para el mercado de valores, y mientras persista, es poco probable que las acciones caigan de manera significativa.
Tecnología impulsa el crecimiento del S&P 500
El índice S&P 500 ha tenido un sólido desempeño este año, logrando un aumento de alrededor del 20%, impulsado en gran medida por las acciones tecnológicas de gran capitalización. Este crecimiento sigue a un año fuerte en 2023, cuando el índice subió casi un 25%.
El sector tecnológico, respaldado por empresas clave, ha sido un motor de crecimiento que ha ayudado a mantener el optimismo del mercado y ha contribuido a un rally constante en el mercado de valores.
Factores de riesgo: rendimientos de Bonos y Elecciones
Los estrategas de Goldman Sachs mantienen una visión optimista, aunque advierten que las elecciones presidenciales y el alza en rendimientos de bonos podrían desencadenar volatilidad.
En los últimos meses, los rendimientos han aumentado por la cautela en torno al ritmo y alcance del ciclo de flexibilización monetaria de la Reserva Federal. Aun así, Ferrario y su equipo consideran que el mercado de valores podrá resistir estos rendimientos más altos si se mantiene el crecimiento económico.
Esta perspectiva no está exenta de riesgos. La volatilidad podría intensificarse tras la elección en EE. UU., especialmente si los resultados generan controversia o las políticas futuras crean incertidumbre.
Goldman Sachs confía, sin embargo, en que el crecimiento económico contrarrestará en gran medida estos factores, favoreciendo una estabilidad relativa en el mercado.
Señales de desaceleración económica
A pesar del optimismo general, los estrategas de Goldman Sachs reconocen que hay señales de una desaceleración económica. En octubre, el crecimiento del empleo alcanzó su ritmo más débil desde 2020, un dato influenciado por factores excepcionales, como huracanes severos y una huelga importante. Además, el camino hacia una inflación más baja sigue siendo complejo y plagado de retos, lo que podría crear algunos obstáculos en el futuro.
Sin embargo, estos signos de debilidad no han evitado que la economía estadounidense mantenga un ritmo de crecimiento sólido. Durante el tercer trimestre, la economía experimentó una expansión notable, sumando otro periodo de crecimiento robusto. Esta tendencia ha ayudado a aliviar las preocupaciones sobre una recesión inminente y ha sostenido el mercado de valores en un nivel saludable.
Inflación y empleo: los desafíos pendientes
La inflación, aunque en una tendencia descendente, sigue siendo un desafío para los responsables de políticas y para el mercado en general.
La Reserva Federal enfrenta un equilibrio difícil entre mantener una economía en crecimiento y controlar la inflación. Los datos recientes sugieren que este proceso de enfriamiento de precios podría no ser lineal, lo que requiere una gestión cuidadosa de la política monetaria.
Por otro lado, la tasa de desempleo se ha mantenido en niveles bajos, lo cual es positivo para el consumo y el crecimiento económico.
Sin embargo, si la creación de empleo continúa desacelerándose, esto podría influir en el gasto del consumidor y, en última instancia, en el rendimiento de las acciones. Los estrategas de Goldman Sachs permanecen atentos a estos factores mientras evalúan las posibilidades de un mercado bajista.
Conclusión: ¿qué depara el futuro para el Mercado Bursátil?
Goldman Sachs anticipa que el mercado bursátil estadounidense logrará evitar una tendencia bajista el próximo año, impulsado por la resiliencia de la economía y el crecimiento en sectores clave, como el tecnológico.
Sin embargo, la volatilidad podría aumentar tras las elecciones presidenciales, y los rendimientos de los bonos y la inflación seguirán bajo vigilancia.
A pesar de algunos desafíos, la economía muestra fortaleza y debería apoyar el mercado de valores. La probabilidad de una caída significativa en el mercado sigue siendo baja, y las perspectivas para el próximo año permanecen favorables.
