La minería de criptomonedas ha sido fuertemente criticada debido a las cantidades excesivas de energía que requiere, lo que no sólo puede estropear las redes eléctricas de la localidad donde se encuentren los mineros, sino que causa un fuerte impacto ambiental.
Al menos eso es lo que nos han querido hacer ver hasta ahora. Sin embargo, CoinShares no está de acuerdo con esta narrativa y la desmiente en su informe “The Bitcoin Mining Network”.
En su investigación, CoinShares explicó que asegurar que la minería de criptomonedas causa un fuerte impacto ambiental no es del todo correcto. De hecho, es una de las industrias que más energía limpia utiliza en todo el planeta.
Casi el 78% de los mineros a nivel mundial utilizan energías renovables para realizar sus actividades. Además, estas personas son bastante conscientes de la cantidad de energía que necesitan, así que tratan en lo posible de ubicarse en zonas frías para no tener que requerir de refrigeración para las máquinas de minar y, de esta manera, consumir menos electricidad.
Pero eso no es todo. Según el reporte de CoinShares, en las zonas donde se han instalado granjas de minería, ha habido una penetración de las energías renovables de hasta un 90%.
“Si la demanda de minería de Bitcoin sigue aumentando, su demanda por sí sola podría facilitar oportunidades para aprovechar ubicaciones de energía renovables altamente productivas en áreas que hoy en día no serían económicamente remontas”, aseguraron los especialistas en el informe.
Además de esto, la minería de criptomonedas ha ayudado a algunos países con sus excedentes de energía. Por ejemplo, China, donde el gobierno ha invertido miles de millones de dólares para desarrollar la energía solar, eólica e hidroeléctrica, está presentando problemas por un exceso de energía limpia generada que no se consume.
Pero las granjas de minería, que usan en su mayoría energías renovables, han ayudado a toda la red eléctrica del país, ya que consumen esa electricidad producida en exceso en lugar de dejar que se desperdicie.
“Sobre la base de datos históricos sobre la combinación de energía y las ubicaciones de las operaciones de minería de criptomonedas en China, hemos demostrado que, a diferencia de la narrativa común, la gran mayoría de la capacidad mundial de extracción de Bitcoins se está ejecutando con energía renovable”, sentenció CoinShrares en el informe.
Tomando en cuenta que el 60% de toda la minería de Bitcoin se encuentra en China, otro 35% en Estados Unidos (específicamente Washington y Oregon), Canadá (Columbia Británica) y Escandinavia, y que en todas estas zonas se utilizan energías renovables para realizar la extracción de criptomonedas, no es de extrañar que los especialistas de CoinShares hayan querido desmentir la idea común de que la minería causa un fuerte daño ambiental.