En diversas ocasiones hemos expuesto la utilidad de la tecnología de realidad virtual para el tratamiento médico, particularmente en el tema de psicología para ayuda a los que la necesitan.

Hemos tratado la ayuda con terapias; hoy gracias al experto en el tema, Sol Rogers, podremos conocer el impacto de la tecnología VR en el tratamiento de las personas con autismo, de todas las edades. Esto es posible gracias a que hizo público sus conocimientos al respecto.

Comenzando con sus definiciones básicas como que el autismo es lo que se conoce como una condición de espectro, lo que significa que afecta a los individuos de diferentes maneras. Los adultos y los niños con autismo tienen problemas de comportamiento, habilidades sociales, comunicación verbal y no verbal, así como problemas sensoriales y de atención que afectan sus vidas. Sin embargo, también tienen identidades, peculiaridades y preferencias únicas, como cualquier otra persona.

Con la Semana Mundial de Concienciación sobre el Autismo que se lleva a cabo esta semana, es un momento único para que todos aprendan más sobre el autismo, desde el público en general hasta los políticos. Casi todo el mundo ha oído hablar de autismo ahora, pero seguimos escuchando a personas autistas y sus familias que pierden una educación, luchan por encontrar trabajo o se vuelven extremadamente aisladas, a menudo debido a malentendidos sobre el autismo y lo que es ser autista.

“Una mejor comprensión del autismo podría transformar las vidas de cientos de miles de personas autistas”. Mark Lever, Director Ejecutivo de la National Autistic Society.

Una herramienta que está siendo aceptada por terapeutas, consejeros, maestros, padres y sus hijos para ayudar a las personas con autismo a comunicarse mejor y conectarse con otros y con el mundo que les rodea es la realidad virtual.

También se usa para ayudar a otros sin autismo a entender lo que significa vivir con la condición. Muchos argumentan que no hay otro medio que se acerque tanto a ponerte en el lugar de alguien como VR.

Los terapeutas e investigadores del autismo comenzaron a utilizar VR a mediados de los años noventa. Los investigadores a menudo implementaron la tecnología para crear entornos virtuales para ayudar a las personas autistas a prepararse para encuentros o situaciones que podrían ser estresantes.

Por ejemplo, el Centro para la salud mental y el Centro de estudio infantil en la Escuela de Medicina de la Universidad de Yale colaboraron para ayudar a los adultos jóvenes con TEA a lograr la independencia económica y social con la ayuda de la VR. Carly McCullar, quien tiene TEA, pasó por el entrenamiento de cognición social del Centro durante su último año.

La capacitación le enseñó a manejar situaciones como las entrevistas de trabajo, un problema con un vecino e incluso las citas.

La VR también se ha utilizado para ayudar a preparar a los niños autistas para hablar en público. Usando una audiencia de avatares que se desvanecieron si el orador no hacía contacto visual, se animaba a los niños a mirar alrededor de la habitación, en lugar de solo mirar hacia adelante. El juego de mantener los avatares en pantalla fue recibido con una buena respuesta de los participantes.

Con esta tecnología se amplía las posibilidades para las personas que no decidieron padecer dicha enfermedad, permitiendo corregir una desigualdad existente en la sociedad. Agradecemos la información publicada por Rogers para la mejor comprensión del tema.

El autor de la noticia se alegra que la tecnología nos permita crecer como sociedad.

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