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De acuerdo con analistas del Bank of America (BofA), el año 2026 no será especialmente favorable para los activos en la bolsa de valores estadounidense. Los expertos de la institución anticipan que las ganancias serán particularmente limitadas para las acciones, una previsión que encaja con el escenario económico delicado que atraviesa Estados Unidos.
Según el reporte citado por CNBC, el equipo encabezado por Savita Subramanian proyecta un desempeño tenue. En esa línea, el índice de referencia S&P 500 cerraría el año sin superar los 7.100 puntos en 2026 (aproximadamente 5%). Se trata de un extremadamente bajo, considerando que actualmente ronda los 6.812 puntos.
La especialista explica que en 2025 se registra una subida del 15% debido a factores combinados como expansiones de múltiplos y crecimiento de ganancias corporativas. Sin embargo, el 2026 estaría impulsado exclusivamente por el aumento de beneficios, estimado en torno al 14%, pero insuficiente para compensar una contracción del 10% en los múltiplos precio-beneficio del índice.
Mientras tanto, en un escenario bajista, el reporte señala que el S&P 500 podría retroceder hasta los 5.500 puntos. Esto representaría una caída cercana al 20% desde los niveles actuales, lo que implicaría un mercado bajista técnico. En síntesis, incluso en el mejor de los casos, el BofA considera que los inversores deberían prepararse para un entorno de rendimientos moderados.
Las acciones se preparan para un año complejo, según el BofA
Es importante remarcar que una caída del 20% en el índice de referencia solo sería probable en un contexto de recesión económica. Por ahora, son pocos los indicadores que sugieren un desplome inminente. De hecho, el 2026 podría marcar el inicio de un ciclo de flexibilización monetaria si continúa la tendencia de recortes de tipos de la Reserva Federal.
Este enfoque genera expectativas de posibles ganancias sólidas, algo que contradice, al menos superficialmente, las advertencias de BofA. En un escenario optimista, el S&P 500 podría incluso superar los 8.500 puntos, según Subramanian, lo que implicaría un aumento del 25% desde los niveles actuales.
Este caso, aunque considerado poco probable por el análisis, estaría en línea con el rendimiento cercano al 20% que mostró el índice en 2023 y 2024. Vale recordar que, durante la última década, el S&P 500 promedió ganancias anuales del 12%. Por ello, el 2026 se presenta como un año marcado por la incertidumbre, con la política monetaria de la Fed como variable determinante.
En el mercado de criptomonedas, el panorama podría ser aún más volátil. Una debilidad generalizada en los mercados financieros aumentaría la presión sobre los activos de riesgo, entre ellos Bitcoin y demás criptomonedas. En ese contexto, los capitales podrían retirarse con rapidez, dando paso a un mercado bajista pronunciado, en línea con los ciclos históricos de cuatro años del precio de Bitcoin.
Aun así, el peor escenario no se considera ampliamente probable por el momento.
