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Bitcoin cierra octubre con un giro inesperado: el mes que históricamente enciende los rallies del mercado se tiñó de rojo. A pocas horas de Halloween, el precio del BTC retrocede 5% en el mes, cotizando en torno a $108.200, según datos de CoinMarketCap.
Un contraste fuerte con el brillo de semanas atrás, cuando marcó un nuevo máximo histórico de $126.200 antes de que el entusiasmo diera paso a la cautela.
Del hechizo alcista al susto del mercado
Durante gran parte de octubre, los analistas hablaban del «Uptober», la racha de ganancias que suele acompañar al mercado cripto en este mes. Pero el ciclo cambió con rapidez. Las tomas de beneficios, el endurecimiento de la liquidez y una leve corrección del apetito institucional devolvieron la volatilidad a escena.
Aun así, el volumen de negociación crece más de 12% en las últimas 24 horas, reflejando que la actividad sigue viva y los inversores no se han retirado del todo. Para muchos traders, este respiro podría ser simplemente una pausa antes de la próxima ola.
El valor total de mercado de Bitcoin ronda los $2,15 billones, con casi 19,94 millones de BTC ya en circulación. Es decir, más del 95% del suministro máximo está en manos del público, lo que refuerza la narrativa de escasez que históricamente precede a los ciclos de recuperación.
Halloween y el espíritu de Satoshi
No deja de ser poético que este giro ocurra justo cuando el ecosistema celebra Halloween y el aniversario del whitepaper de Bitcoin, publicado el 31 de octubre de 2008. Aquel documento, lanzado en plena crisis financiera, fue el hechizo que invocó una nueva era: la del dinero sin amos.
Diecisiete años después, el «fantasma» de Satoshi sigue rondando los mercados. Bitcoin resiste los ciclos, las caídas y los miedos, recordando que el temor -como en toda buena historia de terror- suele ser solo la antesala del cambio.
Hoy, los gráficos pueden parecer sombríos, pero la historia del BTC demuestra que los sustos de octubre a menudo son preludios de repuntes en noviembre y diciembre.
Así, mientras el mundo celebra Halloween, los verdaderos creyentes del sistema descentralizado vuelven a encender las velas. Quizás no para espantar a los fantasmas, sino para invocar el próximo impulso del activo que cambió la historia del dinero.
Porque en Bitcoin, incluso las noches más oscuras tienen su propio brillo.
