Regístrate en Bitget y obtén hasta 100 USDT en bonos completando simples tareas. Oferta por tiempo limitado.
En junio de 2024, el gobierno alemán tomó una decisión que hoy genera controversia global: vendió 50.000 Bitcoin a un precio promedio cercano a USD 54.000, acumulando unos USD 2.880 millones. Lo que parecía una movida ordenada de gestión de activos incautados, hoy se percibe como un error millonario que podría quedar registrado como uno de los peores «malos timings» de la historia cripto.
A julio de 2025, con Bitcoin cotizando por encima de USD 117.000, esos mismos BTC tendrían un valor superior a USD 5.850 millones, lo que representa una ganancia no realizada de más de USD 3.000 millones.
El caso: venta masiva en pleno ciclo alcista
Las ventas se realizaron entre el 19 de junio y el 12 de julio de 2024, según datos on-chain recopilados por Arkham Intelligence y reportes de medios como The Defiant y CoinTelegraph.
Se trató de BTC previamente confiscados a los responsables del sitio pirata Movie2K, en el marco de un proceso judicial. Como dicta la legislación alemana, los activos fueron vendidos en el mercado abierto a través de exchanges y OTCs.
Una lección para gobiernos en la era del Bitcoin
Alemania no es el único país que ha liquidado reservas de Bitcoin. Estados Unidos también ha vendido BTC confiscados, aunque ha mantenido una porción relevante en sus balances. En contraste, países como El Salvador han apostado por la acumulación estratégica, con una narrativa de largo plazo.
Este caso deja varias lecciones:
- El timing en Bitcoin importa: vender durante consolidaciones puede costar caro.
- No todos los Estados entienden la dinámica del mercado cripto: las decisiones muchas veces están guiadas por protocolos legales más que por estrategia financiera.
- El papel del Bitcoin como activo de reserva pública sigue en debate.
¿Error de timing o miopía estructural?
El problema no fue solo vender. Fue vender antes del rally más grande del año. Con BTC duplicando su precio en los 12 meses posteriores, el movimiento genera dudas sobre la capacidad de los gobiernos para actuar con visión estratégica en este nuevo paradigma financiero.
Mientras el mercado celebra nuevos máximos, Alemania enfrenta una dura realidad: haber vendido 50.000 BTC cuando el verdadero rally apenas comenzaba.
