Regístrate en Bitget y obtén hasta 100 USDT en bonos completando simples tareas. Oferta por tiempo limitado.
El Banco de Inglaterra (BoE) tomó la decisión de reducir las tasas de interés en un cuarto de punto porcentual, situándolas en 4.25%. Esta medida busca mitigar el impacto económico derivado de los aranceles impuestos recientemente por Estados Unidos, aunque la decisión generó divisiones entre los integrantes de su Comité de Política Monetaria (MPC).
Divisiones en el Comité de Política Monetaria
La decisión, aprobada con una votación de 5-4, evidenció una heterogeneidad de perspectivas dentro del BoE. Dos miembros votaron a favor de un recorte más agresivo de medio punto porcentual, mientras que otros dos prefirieron mantener las tasas sin cambios. La posición de cautela refleja las preocupaciones sobre la inflación persistente y la incertidumbre económica global.
El gobernador Andrew Bailey subrayó que los movimientos en las tasas no están en «piloto automático», señalando que el banco central debe evaluar cuidadosamente los cambios en el panorama económico antes de tomar nuevas medidas.
Impacto de los aranceles y proyecciones
Los aranceles de EE.UU., anunciados a inicios de abril, han impactado tanto en el comercio como en la confianza económica global. El BoE estima que estas medidas podrían reducir el crecimiento económico en el Reino Unido un 0.3% en tres años y disminuir la inflación en 0.2 puntos porcentuales en dos años. Alrededor de dos tercios de este impacto se deben a una menor demanda de exportaciones británicas.
A pesar de los retos, el acuerdo entre EE.UU. y Reino Unido para eliminar los aranceles al acero británico y reducir los aplicados a los automóviles generó un leve optimismo, aunque Bailey afirmó que aún persiste cierta incertidumbre.
Perspectiva de inflación y crecimiento económico
En su reciente actualización de pronósticos, el BoE redujo ligeramente su proyección de inflación para este año al 3.5%, por debajo de la estimación previa de 3.75%. Se espera que la inflación regrese al objetivo del 2% para el primer trimestre de 2027, nueve meses antes de lo proyectado en febrero.
En términos de crecimiento, el banco central ajustó su previsión para 2025, esperando un crecimiento económico moderado de 1%. Sin embargo, advirtió que el repunte observado en el primer trimestre de este año podría ser temporal, reduciendo su proyección de crecimiento para 2026 al 1.25%, desde el 1.5% anterior.
Perspectivas para las tasas de interés
Tras la reunión, se moderaron las expectativas de un nuevo recorte de tasas en junio, con la probabilidad cayendo por debajo del 20%. No obstante, los inversores siguen anticipando que las tasas podrían situarse alrededor del 3.5% hacia finales de año.
En un contexto marcado por tensiones comerciales y fluctuaciones fiscales, el Banco de Inglaterra se enfrenta al desafío de equilibrar una política monetaria que sostenga el crecimiento económico sin descuidar sus objetivos de inflación.

















