Regístrate en Bitget y obtén hasta 100 USDT en bonos completando simples tareas. Oferta por tiempo limitado.

Las fronteras del impacto de la guerra comercial continúan expandiéndose a cada día. Los activos tradicionales como los bonos del Tesoro de EE. UU. han mostrado un comportamiento volátil, especialmente en un contexto marcado por las tensiones comerciales globales y la desaceleración económica.

Mientras los rendimientos de los bonos a largo plazo se disparan, reflejando una venta masiva en los mercados financieros, muchos inversionistas buscan refugio en activos considerados más seguros. En contraste con estos movimientos en los mercados tradicionales, Bitcoin ha emergido como un activo cada vez más resiliente.

Tal es el impacto de los aranceles de la nueva guerra comercial, que para la semana del 1 al 8 de abril, las importaciones cayeron un 64% en comparación con la semana anterior. Estas respuestas del mercado solamente confirman que las políticas proteccionistas y restrictivas del comercio internacional, son perjudiciales a nivel global.

El Contexto Macroeconómico actual y el impacto de la disputa comercial entre Estados Unidos y China

El panorama refleja un punto de inflexión en la economía global, donde las dinámicas tradicionales y emergentes comienzan a coexistir de diversas formas. Esto conduce a los mercados a una nueva fase de incertidumbre y adaptación. La misma adaptación que promueve la adopción institucional de criptomonedas y el reordenamiento del esquema de inversión global.

A continuación, haremos mención de algunas de las mediciones más importantes en Estados Unidos. Estas cifras nos darán una idea del contexto económico y el impacto de la guerra comercial.

El Índice de Precios al Consumidor (IPC) subió un 2.4% interanual, por debajo de las expectativas de los economistas que proyectaban un aumento del 2.6% y del 2.8% en febrero. En términos mensuales, el IPC experimentó una caída del 0.1%, lo que marcó la primera disminución desde mayo de 2020.

El IPC subyacente anual, que excluye alimentos y energía, aumentó un 2.8%, el menor incremento en casi cuatro años, sugiriendo una desaceleración de la inflación.

Por otro lado, el Índice de Precios al Productor (IPP), que mide la inflación mayorista, creció solo un 2.7% interanual en marzo, lo que representa una disminución respecto al 3.2% de febrero y se encuentra por debajo del 3.3% esperado.

Estos datos apuntan a presiones desinflacionarias, aunque las tensiones comerciales recientes podrían introducir nuevos riesgos inflacionarios, aún no reflejados en las cifras de marzo. Este rezago natural en la economía, será visible en los próximos dos meses a medida que la Federación Nacional de Minoristas, prevé una caída del 20% de las importaciones para la segunda mitad del año.

¿Puede Bitcoin conservar su posición y fortalecerse tras el impacto amplificado de la guerra comercial?

Es importante saber que históricamente, Bitcoin ha experimentado fuertes caídas en tiempos de crisis. Su comportamiento más estable en medio de la volatilidad actual pone en evidencia un cambio significativo en la percepción de los inversores sobre las monedas digitales.

Durante la semana pasada, Bitcoin registró un incremento del 7 %, alcanzando los $83.700. Este repunte se da en medio de un contexto macroeconómico complejo y una situación comercial marcada por la volatilidad. Los recientes cambios en el comercio internacional, tras la imposición de nuevos aranceles y la exención selectiva de otros, continúan generando desequilibrios en la economía global.

En momentos de alta incertidumbre, el capital tradicionalmente fluye hacia los activos refugio, como los bonos del Tesoro estadounidense a largo plazo. Sin embargo, los mercados están presenciando una venta masiva de estos bonos, con el rendimiento del bono a 10 años disparándose al 4,5%. Por otra parte, el bono a 30 años subiendo al 5%, marcando el mayor aumento semanal de rendimiento desde 2022.

El impacto de la guerra comercial en Bitcoin es casi nulo durante el primer mes de aranceles
Precio de Bitcoin durante las últimas 24 horas. Fuente: CoinMarketCap

Al momento de redacción de esta nota, Bitcoin alcanza el valor de $85.068, según CoinMarketCap. Aunque solo aumentó un 1% en las últimas 24 horas, las presiones inflacionarias y globales no terminan de perjudicarle del todo.

En este contexto, los inversores tienden a buscar activos alternativos que no estén tan directamente correlacionados con los mercados tradicionales. Es aquí donde Bitcoin y otras criptomonedas juegan un papel importante.

A medida que los rendimientos de los bonos del Tesoro aumentan debido a la venta masiva y la volatilidad de los mercados, los activos tradicionales como los bonos y las acciones se vuelven menos atractivos debido al riesgo y la presión inflacionaria.

Quedará de parte del mercado decidir si tras una guerra de aranceles entre China y Estados Unidos, Bitcoin emerge como un activo refugio mucho más llamativo que en otras situaciones.

¿Inflación o desaceleración?

En estos momentos, la Reserva Federal de Estados Unidos se plantea una gran interrogante. ¿Es el momento correcto para soportar la inflación o desacelerar la economía? La desaceleración económica normalmente justificaría una flexibilización monetaria. Pero los riesgos de inflación derivados de los aranceles podrían retrasar los recortes de tasas. Esto terminará por aumentar las preocupaciones de una posible estanflación.

Además, el aumento de los rendimientos de los bonos ya está endureciendo las condiciones financieras. De manera que aumentan los costos de endeudamiento, lo que podría profundizar la desaceleración económica.

El miércoles pasado, Estados Unidos suspendió los aranceles recíprocos para la mayoría de los países. Reduciendo la tasa al nivel base del 10%, pero simultáneamente aumentó los aranceles sobre China al 145%. Esta medida tuvo respuesta inmediata, China incrementó sus aranceles sobre los productos estadounidenses del 34% al 125% y tomó medidas adicionales contra empresas de EE. UU.

Sin embargo, tras la respuesta de China, el presidente Trump aclaró que ciertos productos, como teléfonos inteligentes y computadoras, no estarían sujetos a los nuevos aranceles del 145%.

Una conclusión abierta ante un futuro macroeconómico incierto

La actual guerra comercial mundial entre China y Estados Unidos y las tensiones económicas están generando un entorno de incertidumbre que afecta profundamente los mercados financieros tradicionales, como los bonos del Tesoro y las acciones.

La venta masiva de bonos, el aumento de los rendimientos y la volatilidad resultante de las políticas arancelarias están presionando los precios y amplificando el riesgo de recesión.

Este cambio refleja un punto de inflexión en los inversores, quienes, ante la inestabilidad de los mercados tradicionales, están viendo en Bitcoin un activo más atractivo y resistente frente a la inflación y la incertidumbre.

Deja un comentario