Regístrate en Bitget y obtén hasta 100 USDT en bonos completando simples tareas. Oferta por tiempo limitado.
Las recientes decisiones de la Reserva Federal (Fed) y el Banco Central Europeo (BCE) han marcado un punto clave para la evolución del euro frente al dólar.
Mientras la Fed mantiene sus tipos de interés en el rango del 4,25%-4,50%, el BCE ha optado por un recorte de -25 puntos básicos (pb), situando el tipo de depósito en 2,50%.
Las políticas de la Fed reflejan una estrategia de cautela ante la incertidumbre macroeconómica. Aunque el mercado laboral estadounidense sigue sólido, el crecimiento del PIB se revisó a la baja para 2025 (+1,7%) y 2026 (+1,8%). A su vez, la inflación PCE se elevó levemente, indicando presiones inflacionarias persistentes.
Por otro lado, el BCE ha endurecido su discurso a pesar del recorte de tipos, argumentando que la economía de la eurozona sigue afectada por la debilidad de la inversión y las exportaciones. Además, el organismo ha retrasado la proyección de alcanzar su objetivo del 2% de inflación hasta 2026.
Impacto en la cotización del Euro frente al Dólar
El diferencial de políticas monetarias entre la Fed y el BCE impacta directamente en el valor del euro frente al dólar.
Mientras la Fed mantiene una postura restrictiva, el BCE ha optado por flexibilizar su política. Este escenario refuerza al dólar, ya que los inversores buscan refugio en activos con mayor rendimiento, como los bonos del Tesoro estadounidense.

La menor demanda de euros debilita su cotización, lo que podría llevar a una depreciación frente al dólar en el corto plazo. Sin embargo, si la Fed opta por reducir los tipos en septiembre y diciembre de 2025, podría generarse un respiro para la moneda europea.
Perspectivas a mediano plazo
Los expertos prevén que el euro podría continuar con una tendencia bajista mientras la incertidumbre persista. Factores clave a considerar incluyen:
- Evolución de la inflación: Un repunte inesperado podría retrasar los recortes de la Fed, fortaleciendo al dólar.
- Dinamismo económico de la eurozona: La recuperación del consumo y la inversión podrían frenar la caída del euro.
- Política fiscal en la UE: Posibles estímulos podrían reactivar la economía y sostener la divisa europea.
Conclusión
El euro enfrenta presiones bajistas frente al dólar debido a las divergencias en política monetaria entre la Fed y el BCE.
A corto plazo, la divisa europea podría mantenerse débil, aunque futuras decisiones de tipos podrían generar oportunidades de recuperación.
La evolución económica y las políticas fiscales serán determinantes en el comportamiento del mercado de divisas en los próximos meses.

















