Regístrate en Bitget y obtén hasta 100 USDT en bonos completando simples tareas. Oferta por tiempo limitado.
En su última reunión de diciembre, los funcionarios de la Reserva Federal (Fed) compartieron sus preocupaciones sobre la inflación y el impacto que las políticas propuestas por el presidente electo Donald Trump podrían tener en la economía de Estados Unidos.
Aunque el nombre de Trump no fue mencionado directamente, las minutas reflejaron referencias claras a las posibles consecuencias de los cambios en políticas comerciales e inmigratorias, generando un ambiente de incertidumbre que está influenciando las decisiones de política monetaria.
Decisiones sobre tasas de interés y el impacto de las políticas de Trump
En el encuentro, el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés) decidió reducir la tasa de interés de referencia a un rango objetivo de 4.25%-4.5%. Sin embargo, los miembros también acordaron disminuir su perspectiva de futuras reducciones para 2025, de cuatro a solo dos, señalando un ritmo más cauteloso en las decisiones de política monetaria debido a la incertidumbre que rodea las acciones propuestas por Trump.
El presidente electo ha insinuado una serie de medidas, como la imposición de aranceles agresivos a países como China, México y Canadá, además de una mayor desregulación y posibles deportaciones masivas. Estas acciones, aunque no especificadas en detalle, han creado un panorama ambiguo para los responsables de la política económica en Estados Unidos.
Aumentan los riesgos inflacionarios
Según las minutas, casi todos los participantes de la reunión señalaron que los riesgos de alza en la inflación habían aumentado. Esto se atribuye a lecturas recientes de inflación más altas de lo esperado y a los posibles efectos de los cambios en las políticas comerciales e inmigratorias.
Actualmente, las proyecciones indican que la inflación podría permanecer por encima de la meta anual del 2% de la Fed en el corto plazo, con algunos funcionarios prediciendo que no volverá a este nivel hasta 2027.
Mientras tanto, la inflación subyacente en noviembre alcanzó un 2.4%, con una tasa general que incluye alimentos y energía llegando al 2.8% en comparación con el mismo periodo del año anterior. Estas cifras refuerzan la necesidad de un enfoque prudente en la política monetaria.
Una estrategia cautelosa hacia el futuro
Los funcionarios de la Fed dejaron claro que las futuras decisiones de política dependerán en gran medida de cómo evolucionen los datos económicos. Algunos miembros destacaron que la economía muestra señales sólidas en áreas como el consumo, el mercado laboral estable y un Producto Interno Bruto creciendo por encima de la tendencia en 2024. Sin embargo, el alto grado de incertidumbre exige actuar con cautela.
Jerome Powell, presidente de la Fed, describió esta situación como «conducir en una noche neblinosa o caminar en una habitación oscura llena de muebles. Simplemente, se debe avanzar con lentitud». Este enfoque resume el sentimiento general de los participantes, quienes acordaron que el Comité está cerca de alcanzar un punto en el que es apropiado desacelerar el ritmo de flexibilización de la política monetaria.
De acuerdo con el gráfico de puntos (“dot plot”), los funcionarios anticipan que para 2026 podrían realizarse solo dos recortes adicionales, con la posibilidad de uno o dos más después. Eventualmente, proyectan que la tasa de fondos federales bajará a un nivel a largo plazo de 3%.

Conclusión
Las decisiones de la Reserva Federal para 2025 están siendo moldeadas por un entorno económico incierto y los posibles efectos a largo plazo de las políticas de Donald Trump.
La combinación de riesgos inflacionarios al alza, un panorama económico sólido pero incierto, y la necesidad de mantener una estrategia flexible sugiere que la Fed continuará avanzando con cautela en los próximos meses. En última instancia, su prioridad será encontrar el equilibrio entre sostener el crecimiento económico y controlar la inflación en un contexto lleno de desafíos impredecibles.

















