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La Federación de Rusia parece dispuesta a no quedarse de brazos cruzados mientras las sanciones occidentales limitan su economía. En ese sentido, la autoridad de esa nación euroasiática tiene planes de crear dos exchanges propios para estimular el comercio cripto. Además, planean la creación de una stablecoin del BRICS.
Se trata de iniciativas de gran calibre y que podrían cambiar el curso financiero histórico en las relaciones entre los dos bloques globales de poder. Tanto el BRICS como Occidente forcejean por un nuevo reparto de los mercados y la hegemonía económica. Como se puede notar, las criptomonedas tienen un papel significativo en esta pelea.
La stablecoin del BRICS se prepara para desafiar al dólar
En su discurso en la Conferencia Bitcoin 2024, el candidato republicano a la presidencia de EE. UU., Donald Trump, criticó la utilización del dólar como un arma de guerra. Lamentó que esta actitud, que se hizo habitual durante el actual gobierno con las sanciones, está llevando a grandes mercados a alejarse del USD.
El hecho de que el bloque de China, India, Rusia, Brasil y Sudáfrica plantee una alternativa al dólar da relevancia a la advertencia de Trump. De concretarse este plan, la demanda del dólar podría sufrir un impacto colosal. Aunque probablemente no sea desplazada de su puesto de reserva global, la relación de poder habrá cambiado de manera dramática.
La des-dolarización del comercio global persigue crear un mundo multipolar y dar más independencia a los mercados de los caprichos políticos de Washington. En todo caso, Moscú anunció planes para crear dos exchanges de criptomonedas que estimulen el uso de estos activos. Mediante estas plataformas, la nueva stablecoin del BRICS podría cobrar vida.
Aunque no está claro cómo funcionará este activo, algunos expertos como Oleg Ogienko, CEO de BitRiver, señalan numerosos desafíos. El ejecutivo explica que integrar una stablecoin en la economía de Rusia presenta grandes dificultades, sobre todo en el tema de liquidez y el impacto en la banca privada.
Algunos detalles de la iniciativa rusa
Básicamente, la moneda estable de los BRICS se manejaría como una unidad de cuenta. Así, los países miembros podrían realizar transacciones comerciales entre ellos con sus respectivas monedas locales o en la stablecoin. La eficiencia de esta iniciativa se encontraría en el abaratamiento de los procesos y en la independencia con respecto al dólar.
Como es de suponer, este funcionamiento estaría completamente al margen del sistema SWIFT. En su lugar, los países de la zona cuentan con varios proyectos, de los cuales nacería el denominado «puente BRICS». Este también permitiría la integración de los sistemas de CBDC de los países miembros del bloque.
Por su parte, los exchanges permitirían a los países miembros comerciar entre ellos de una manera más práctica. Estos exchanges tendrían funciones aparte de ser plataformas de negociación. Además, podrían convertirse en plataformas de liquidez para las monedas locales.
En líneas gruesas, parecen un sistema bien pensado para mantener un sistema financiero más robusto. Con ello, anularían la vulnerabilidad que representan las presiones externas, sobre todo la de los países occidentales.
La iniciativa de una stablecoin del BRICS no es nueva y su planteamiento ya se conoce desde hace varios meses. Sin embargo, la creación de exchanges se convierte en testimonio de que la misma está cobrando forma.
Importancia de la blockchain en esta transición
La implicación de la tecnología blockchain y las monedas digitales en estos planes de transformación de la economía global es enorme. Básicamente, esta novedosa tecnología se convierte en la salvación para los países que buscan zafarse de la presión de Estados Unidos y su dólar.
En palabras simples, de no ser por la cadena de bloques, algunas economías irreverentes como China y Rusia estarían condenadas a sucumbir en el futuro. Para países contrarios a EE. UU. las sanciones fueron letales durante años y ahora los BRICS parece que descubrieron la llave para librarse de ellas.
Como ya se mencionó, todavía no está claro cómo se llevará adelante este plan y si será efectivo. Sin embargo, el contexto geopolítico lo presenta como uno de gran relevancia. No se debe perder de vista que el BRICS planea expandirse, lo que podría significar que socios clave de Occidente podrían sumarse a ese nuevo epicentro de poder desmarcado del dólar.
