La reflexión del día de hoy es una de las más importantes que me ha tocado escribir, ya que la bolsa de los Estados Unidos se encuentra en máximos históricos, mientras que su economía se hunde a niveles jamás visto.
Si bien sabemos que la economía va por un lado y la especulación financiera por otro… En este caso es salvaje la brecha que separa ambas realidades.
El aumento de las acciones tecnológicas ha llevado al índice Nasdaq a su valor más alto de la historia en 10.600 puntos, con un rendimiento del 17% anual. Mientras tanto, el Coronavirus sigue haciendo estragos en los EE.UU., destruyendo su economía diaria.
Ya lo adelantó el propio presidente de la FED, Jerome Powell. La economía de Estados Unidos registró en el segundo trimestre del año la peor lectura jamás registrada, con una contracción anualizada de su Producto Interno Bruto (PIB) del 32,9%.
Al menos eso indica la primera lectura oficial presentada el jueves por el Buró de Análisis Económico (BEA, por sus siglas en inglés) del Departamento de Comercio del país, que confirma que en los tres primeros meses de 2020, EE.UU. registró un crecimiento negativo del 5%.
La disminución en el PIB real reflejó disminuciones en los gastos de consumo personal (PCE), exportaciones, inversión de inventario privado, inversión fija no residencial, inversión fija residencial y gasto del gobierno estatal y local que fueron parcialmente compensados por un aumento en el gasto del gobierno federal. Las importaciones, que son una resta en el cálculo del PIB, también registraron caídas.
Los economistas encuestados estimaban una caída aún mayor, de alrededor del 35%. Ni la Gran Recesión ni ninguna de las más de tres docenas de crisis económicas en los últimos dos siglos han causado una contracción tan profunda de la actividad económica en un período de tiempo tan corto. El PIB se contrajo alrededor de un 9,5% en el segundo trimestre con respecto al primero, lo que equivale a un ritmo anualizado de casi el 33%, sentencia elEconomista.
Si algo ha quedado al descubierto en esta pandemia, es la fragilidad del capitalismo para hacer frente a la crisis. Si los Estados Unidos está en esta situación, te puedes imaginar lo que sucederá en economías frágiles de América latina.
Al momento de la redacción, hay poco más de 17.3 millones de contagiados en el mundo, con 673.000 muertos, una cifra bestial. Sólo en los EE.UU. hay más de 4.6 millones de infectados y 154.000 muertos. Como si fuera poco ya se habla de una segunda oleada.
En lo personal creo que la “pandemia económica” recién está comenzando. Cuando se desate va a ser de una letalidad temible, y serán muy pocos los activos refugios para preservar el valor de nuestros ahorros. Por ahora sólo el Oro y el Bitcoin parecen lo más seguro. No hay que descartar tampoco al yen japonés y al franco suizo.
Me despido hasta mañana con esta frase de John F. Kennedy:
“En la crisis, sé consciente del peligro, pero reconoce la oportunidad”.
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