“Bitcoin no es dinero”. Para todos los criptoversianos, resultará familiar haber escuchado esa frase en algún momento. Esto muy probablemente luego de tratar de compartir y debatir con alguien sobre la criptomoneda.
Pero como lo he comentado anteriormente, si tienes la intención de que alguien entienda ¿qué es Bitcoin?, primero tendrá que entender ¿qué es el dinero?. Nunca al revés.
Aunque pareciera un concepto tan obvio; la realidad es que basta con preguntarles a las personas ¿qué es el dinero?, para darnos cuenta a los pocos segundos y varios titubeos que estarán perdidos en la mayoría de las veces.
Por esa razón, no se puede pretender que Bitcoin sea recibido con los brazos abiertos a la primera.
Y es que el dinero en sí mismo, implica mucho más que unos papelitos con los rostros de nuestros héroes nacionales o unas monedas para el café.
Según los economistas (y Wikipedia) quienes tienen una definición estricta de lo que es válido como dinero y se considere como tal, debe tener tres atributos.
En realidad, hay otras características (por aquello de “infórmate bien”) pero los principales son los siguientes.
1- El dinero debe ser un medio de intercambio
Según nuestros amigos cripto-haters Bitcoin no es dinero, porque no es un medio de intercambio. Con lo cual estamos parcialmente de acuerdo; dado que el dinero debe ser aceptado por todos.
Actualmente, el medio de intercambio por excelencia es el dólar estadounidense. El dólar es una divisa que está respaldada por toda la fe y toda la confianza que nos genera el ejército de las barras y las estrellas.
Sólo eso.
De esta forma, la mayoría de los países no se resisten ante tal persuasión. La realidad es que lo usamos de forma impositiva y sobran los ejemplos de las consecuencias de no hacerlo.
Ante tal caso, Bitcoin tiene una ventaja, solo lo pueden usar quienes deseen y quienes quieran hacerlo. No se obliga a nadie siquiera a utilizar un satoshi. Es democrático al alcance del que guste.
Aunque pienso que falta mucho, para que podamos utilizar a Bitcoin como medio de intercambio masivo. La criptomoneda ya se utiliza en algunas plataformas para el intercambio por bienes y servicios.
Incluso, se han comprado propiedades con Bitcoins en algunos países. Tú podrías hacer lo mismo en tu país, sólo busca quien quiera aceptar el acuerdo.
A esto hay que considerar que quienes ven un potencial en Bitcoin, actualmente prefieren acumular en lugar de intercambiarlo.
Y si piensas que tal vez nunca será aceptado por todos. La realidad es que si funciona como medio de cambio para un sector, con eso será suficiente.
Si lo analizamos, Bitcoin podría funcionar como un medio de intercambio, como lo hace una divisa dentro del territorio de algún país, fuera de sus fronteras no funciona igual, pero dentro funciona sin problemas.
2- El dinero debe ser una unidad de cuenta
Esto significa, que el dinero debe medir y representar la riqueza y sus derivados. Esto lo damos por sentado, cuando damos respuesta a ¿cuánto tenemos ahorrado? ¿cuánto será nuestra ganancia?. Y se entiende “el valor” de las cosas y el dinero.
Incluso sirve para determinar ¿cuánto vale nuestro tiempo o trabajo?. Actualmente, Bitcoin no es la mejor referencia para ello, dada su volatilidad.
Adicional a esto; nuestro subconsciente colectivo está acostumbrado a medir el precio de las cosas con dólares.
La razón de ello, se explicó en el punto 1, ya que la divisa de uso común es el dólar.
Para que Bitcoin, logre ser considerado como unidad de cuenta deberá alcanzar y mantener el tercer atributo. Cuando esto sea así, los usuarios de Bitcoin estarán acostumbrados a utilizar a la criptomoneda como referencia.
3- El dinero debe ser una reserva de valor
De entrada, el dólar como divisa no puede cumplir con este atributo. Hace 49 años que no puede hacerlo, desde que se eliminó el patrón oro.
Con ello, la inflación hace su trabajo y los mismos 30 dólares que te pagaban unos buenos zapatos hace 3 años, hoy ya no pueden.
Por otra parte, existe un gran debate de si Bitcoin está respaldado por algo o no. Pero eso es un gran tema para otro artículo.
A esto mismo, debemos agregar que existe un error en la mayoría de las personas al pensar que precio y valor son la misma cosa; cuando no lo son.
Y aunque precio y valor no son lo mismo; debe existir una correspondencia o paralelismo cercano entre ambos. Porque de esa forma, resulta fácil establecer por cuánto dinero intercambias un bien o servicio y se simplifican las cosas.
Pero, no cuesta mucho aceptar que hasta ahora; Bitcoin no ha demostrado ser una reserva de valor estable o confiable. Esto es quizá el estigma más grande que tiene que superar; por lo menos para la mayoría.
Su alta volatilidad es motivo de temor e incertidumbre para el grueso de los inversores. Puesto que hay un temor de que hoy vendas tu casa por 5 Bitcoins a 8 mil dólares y mañana esos mismos Bitcoins amanezcan a 6 mil cada uno.
Para que Bitcoin pueda ser una reserva de valor confiable para el colectivo; tendrá que disminuir su volatilidad. Pero para que ello ocurra, tendrá que aumentar mucho su precio.
Esto debido a que la volatilidad es mayor en un mercado pequeño puesto que con poco capital se puede mover; mientras que un mercado gigante 300 millones transferidos en un instante no le hacen cosquilla.
Por lo anterior; no podemos esperar a que la adopción masiva llegue cuando se haya ido la volatilidad. La volatilidad caerá cuando la adopción masiva haya llegado.
Conclusión
A pesar de que los 3 principales atributos del dinero no son cubiertos a cabalidad por Bitcoin; en mi opinión es cuestión de tiempo que lo logre.
Esto debido a que la tecnología sigue siendo la misma y no se ve afectada cuando Bitcoin cuesta 10 mil ó 3 mil dólares. Sigue funcionando para lo que fue diseñada, transferir de uno a uno sin terceros de por medio.
Cuando una gran cantidad de personas vean en Bitcoin el potencial de controlar una herramienta que les permita intercambiar sin la intervención de un intermediario y controlar con ello su riqueza; la nueva referencia será Bitcoin y no otra divisa.
De lo contrario, se pensará que Bitcoin no es dinero.
