Las Ofertas Iniciales de Monedas, mejor conocidas como ICO, se convirtieron en un tema bastante polémico en la industria criptográfica. Aunque al principio se consideraban como una gran solución, ahora muchas compañías las ven con recelo. Pero, ¿cómo ocurrió esto? En este artículo te explicamos qué ha ocurrido con el mercado de las ICO.

2017: El auge

2017 fue el año donde las Initial Coin Offering (ICO) empezaron a ganar realmente fuerza dentro del ecosistema. De acuerdo con icodata, se hicieron 875 ICO en total. Estas lograron recaudar aproximadamente 6.000 millones de dólares.

Sin embargo, a pesar de las ganancias, no todo fue color de rosas. Durante este año, también se intensificaron las investigaciones de parte de gobiernos y reguladores hacia las ICO. Esto se debe a que los proyectos de ese tipo podían dar cabida a estafas y fraudes.

Aunque en 2017 hubo varios casos de fraudes relacionados con las ICO, la “fiebre” por utilizarlas superó el temor a ser engañado. Sin embargo, los reguladores decidieron intensificar las legislaciones en contra de estos proyectos.

El 2017 cerró con grandes expectativas respecto a estos proyectos, pero con un sentimiento de incertidumbre que iba en aumento.

2018: La caída

Los problemas reales comienzan a percibirse en 2018. Aunque durante los primeros meses se registraron niveles históricos, logrando recaudar aproximadamente 13 mil millones de dólares, pronto la situación cambió.

Evolución de las ICO en 2018
Evolución de las ICO en 2018

Como se puede apreciar en la gráfica, durante el 2018 las ganancias relacionadas con las ICO fue decreciendo hasta niveles mínimos en diciembre.

¿La razón? Ya para este año, los fraudes y estafas relacionadas con las ICO se multiplicaron. Incluso hubo un momento en el que una Oferta Inicial de Moneda cualquiera era inmediatamente relacionada con algo delictivo.

La modalidad para cometer estas acciones eran las exit scam o estafas de salida. Consisten en un tipo de fraude en donde empresas o proyectos de Internet mantienen abierta la recepción de dinero de sus clientes sin devolver ningún producto a cambio. En este caso, el proyecto recibe dinero de sus contribuyentes pero ellos no reciben los tokens prometidos.

Claramente, las regulaciones hacia las ICO se intensificaron en pro de proteger al usuario de una posible estafa. Y las consecuencias de esto no se hicieron esperar. Ya para agosto de 2018, 10 ICO cuyos tokens se habían comercializado por lo menos seis meses, perdieron 93% de su valor.

Para finales de ese año, los proyectos eran evadidos por la mayoría de los miembros de la comunidad criptográfica. Esto se debe a que temían ser estafados.

2019: Estancamiento

En 2019, la caída de las ICO continuó su camino descendiente. Para marzo, ya había perdido más del 50% que poseía en enero. Esto demuestra la rapidez con la que estos proyectos perdían popularidad dentro del ecosistema.

Actualmente, aunque aún se realizan proyectos de este tipo, su popularidad ha decrecido de una forma considerable. Aunque las medidas de seguridad han logrado que algunas personas recuperen la confianza en las ICO, es poco probable que regresen a los niveles en los que se encontraban en 2017.

2020: Futuro

Por los momentos, el futuro del mercado de las ICO no augura muchos cambios a su comportamiento en 2019. Sin embargo, se espera que se continúe el proceso de “recuperación de confianza”, por parte de la comunidad criptográfica, que se ha gestado hasta ahora. Pero no se espera que lleguen a los niveles de “fiebre” que alcanzaron años atrás.

¿Qué piensas del mercado de las ICO… hay futuro? Déjanos saber en la sección de los comentarios.

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