El equipo de investigación de la Unidad de Resistencia (TRU) una vez más cavó profundamente en la economía para bienes y servicios ilícitos. En el análisis pudieron observar que usuarios interesados compran malware y datos de tarjetas de crédito robadas, así como también pueden contratar a un estafador para desconectar el sitio web de su competidor, mejorar su puntaje de crédito o robar las credenciales de correo electrónico de una persona.
Ahora bien, una de las tendencias más alarmantes que vio el equipo de TRU surgir este año fue el número de ciberdelincuentes que pueden vender efectivo en frío por solo 10 centavos a 12 centavos de dólar.
Los estafadores financieros están dando a los compradores la oportunidad de comprar efectivo en varias cantidades: $ 10,000, $ 5,000, $ 2,500. En este sentido, todo lo que el comprador tiene que hacer es prepagar al criminal su 10% a una tarifa del 12% en Bitcoin y proporcionarles una cuenta bancaria o PayPal. El comprador también puede optar por tener el dinero enviándolo a ellos a través de Western Unión.
Como un servicio extremadamente simple y llave en mano, este acuerdo ofrece a los compradores retornos altísimos de su compra ilícita y elimina la necesidad de una mula de dinero o el riesgo de iniciar sesión en cuentas comprometidas. Como señala el informe, las mulas de dinero son agentes que transfieren fondos ilícitos entre cuentas a cambio de una tarifa del 10% al 20% del valor.
Además, este arreglo funciona bien para el cibercriminal vendiendo los fondos robados porque, en última instancia, él o ella no está tomando posesión de los fondos, ya que simplemente está transfiriéndolos, lo que pone la mayor parte del riesgo en la compra de estafadores el dinero.
Con el exceso de credenciales bancarias en línea y tarjetas de crédito (que pueden usarse para transferir dinero a través de Western Unión) a la venta en el metro mercados, no fue una sorpresa para el equipo TRU que los cibercriminales descubrirían más formas de monetizar estos bienes ilícitos.
Otros artículos que ganaron popularidad este año fueron artículos de papeles de constitución y propiedad única. Para esos estafadores que quieren convertirse en mulas de dinero de alta gama, estos documentos son como el oro porque vienen con un número de identificación de empleador (EIN), que a su vez permite a un estafador abrir en un banco una cuenta comercial. Dichos actores suelen abrir cuentas bancarias comerciales costosas para evitar activar alertas de fraude o llamar la atención no deseada al realizar grandes volúmenes.
Las cuentas bancarias de las mulas de dinero son esenciales para el éxito de las compras fraude financiero.
Chris Hinkley, jefe de la Unidad de resistencia a las amenazas de Armor, dijo:
“Para aquellos estafadores que no poseen las habilidades técnicas y una red robusta de mulas de dinero para monetizar las cuentas bancarias en línea o las credenciales de tarjetas de crédito, esta es una oferta que puede ser muy atractiva . Este servicio inteligente les brinda un adicional canal para monetizar las grandes cantidades de datos financieros disponibles en el subsuelo”.
El equipo de TRU confía en que, como este año, surgirán diferentes tendencias en 2020. Y aunque los mercados negros y los foros pueden cambiar de año en año, queda algo siempre latente y es que los cibercriminales persiguen ganancias.
Por lo tanto, cada organización, no importa cuán grande o cuán pequeño, ya sea público o privado, está en riesgo de convertirse en víctima de cibercrimen y como resultado, el riesgo se extiende a sus clientes, sus empleados, sus socios comerciales y la lista continúa.
Por lo tanto, es fundamental que las empresas, así como los individuos, sean conscientes de las amenazas cibernéticas actuales, cómo los delincuentes están logrando estos crímenes digitales y la mejor manera de proteger a la organización y a uno mismo contra estos ciberataques.
Tomará cada entidad y cada individuo trabajando juntos para asegurar que Internet siga siendo un lugar seguro para que prosperen las buenas personas y las buenas organizaciones.
