Funcionario de Coinbase reflexiona sobre la seguridad en la industria criptográfica

El jefe de seguridad de Coinbase, la casa de cambio criptográfica más grande de Estados Unidos, Philip Martin, realiza algunas reflexiones para tratar de explicar el tema de la seguridad dentro de la industria de las monedas digitales.

Cuando alguien está ingresando al mundo de las criptomonedas, entender cómo funcionan sus sistemas de seguridad puede ser algo complicado. Es por ello que Martin trata de explicar las principales diferencias que existen en este sector entre la banca tradicional y las empresas criptográficas.

En un banco típico también existen protocolos criptográficos, pero a menudo se limitan a dos categorías básicas: enmascarar información personal, como números de Seguro Social, y garantizar que los sitios web estén protegidos. Sin embargo, las billeteras de monedas digitales son diferentes, porque el cifrado desempeña un papel fundamental.

Para explicar la importancia de esto, Martin aseguró que “nos ocupamos de las claves de larga duración que generamos que viven durante mucho tiempo, que son el controlador directo del valor líquido”, y añadió:

“La posesión de una llave es la posesión de su moneda. Lo que eso significa es que no puede revocar una clave de criptomoneda, si esa clave se pierde, se ve comprometida, no hay posibilidad de recuperar (el valor)”.

Esto hace que el riesgo de robo de datos encriptados sea mucho más severo que, por ejemplo, el robo de datos encriptados de Seguridad Social en instituciones financieras tradicionales, explicó. “Las consecuencias de la pérdida son mucho mayores”, lo que significa que los atacantes son mucho más agresivos para obtener acceso a ese cifrado.

Debido a lo delicado del asunto, empresas como Coinbase deben dedicar parte de sus esfuerzos a educar a sus clientes sobre la seguridad en la industria de las monedas digitales y los posibles riesgos a los que pueden estar expuestos.

Martin afirmó que los bancos tradicionales tienen una ventaja sobre las empresas criptográficas, ya que “las transacciones en el sistema fiduciario tradicional son reversibles”, mientras que las transacciones a través de Blockchain son, en general, irrevocables.

Aunque los bancos pueden tener más problemas con el fraude electrónico que implica la suplantación del CEO, los usuarios de criptomonedas a menudo están sujetos a estafas de “soporte técnico”, donde el criminal llama a un cliente para convencerlo de que entregue información valiosa de seguridad haciéndose pasar por un trabajador de la empresa, comenzando con “estoy aquí para ayudarlo con el problema de su cuenta Coinbase”.

Las compañías dentro de la industria criptográfica han tratado de tomar sus propias medidas para solucionar algunos problemas de seguridad, como implementar la norma “Conozca a su Cliente” (KYC, por sus siglas en inglés), para tratar de excluir a los clientes que pueden estar usando su cuenta para transacciones ilegales.

Sin embargo, las criptomonedas siguen relacionándose con actividades ilegales. Esto ocurre, de acuerdo con Martin, por la confianza que se tiene en el sistema financiero estadounidense.

“La parte más difícil de esta conversación es que en los EE. UU. tenemos un sistema financiero bastante confiable. Es fácil de usar, tenemos tarjetas de crédito, tenemos cuentas bancarias, confiamos en que esas instituciones hagan lo correcto (…) Cuando salimos de los EE. UU., los casos de uso de servicios públicos se vuelven mucho más obvios (…) en lugares como Venezuela, como una orilla de valor en un lugar donde los ciudadanos comunes han perdido la fe en su gobierno para manejar su dinero”.

Por último, mencionó que tiene grandes esperanzas en el proyecto Libra, liderado por Facebook, ya que lo ve como la oportunidad perfecta para aumentar la adopción a nivel mundial y llevar las monedas digitales a más de mil millones de personas.