En este inicio de trimestre Q3 y semana 23 del año 2019, el mercado cripto ha estado en rojo en la mayoría de sus criptomonedas principales, especialmente dentro del top ten a excepción de un claro ganador que repite por segunda vez un momento alcista en medio de la tormenta, Bitcoin Satoshi Vision.

El mercado se encuentra en contracción y está al límite de su market cap de los últimos días, en el nivel de $270 billones de dólares, con BTC aumentando su dominio al 55,9%.

BSV se encuentra anclado a la octava casilla con un precio de cotización al momento de redactar de $221,44 por unidad y un crecimiento en las últimas 24 horas de hasta un 16,25%, con un volumen intradiario que ya se acerca al billón de dólares.

Su fuerte dependencia del Tether, siendo el par BSV/USDT el que más aporta a su mercado con casi un 40%, le permite no depender en cierta medida con el movimiento de BTC.

A corto plazo, la criptomoneda parece no cesar en su escalera que ya hemos descrito anteriormente y vuelve a sumar un escalón esta vez al inicio de mes, generando una onda elliot que promete llevar a BSV hasta niveles de R1 @ $254,32, su máximo histórico.

Su soporte clave permanece en el nivel de quiebre del triángulo isométrico creado al límite de los doscientos dólares por unidad, coincidente con EMA 30 días.

Aroon Uptrend se ha dirigido al fondo, junto a su par bajista, lo cual indica la trayectoria actual de la segunda onda de Elliot que se encuentra en proceso de desarrollo.

El indicador Estocástico permanece en niveles altos de venta, y ha resistido el ataque de oso al no llegar a límite de compra-venta. Al contrario sigue alcista, indicando la fuerte presión de compra sobre el altcoin.

A mediano plazo, BSV en el gráfico de 1H muestra un fuerte canal ascendente iniciado en el mes anterior y que ha tenido su auge a finales de mayo, con un empuje de casi x4 veces su precio promedio del año.

El soporte clave permanece en la franja de Fibonacci y coincidente con EMA 50 a niveles de $66.

Fibonacci nos indica una fuerte soporte y posibilidad de que el precio caiga a mediano plazo a niveles de $180.462. Sin embargo esto parece ser momentáneo, para BSV que se proyecta lograr niveles de $302,75.

CMF es alcista y está indicando la fuerte entrada de capital al ecosistema de BSV.

RSI por su parte tiene una fuerte pendiente que finaliza en la zona de sobrecompra, mejor indicador imposible para señalar el momento alcista a mediano plazo de BSV.

Bitcoin SV es la propuesta de Craig Wright resultante del fork de Bitcoin Cash del noviembre del año 2018, luego de generarse una fuente tensión y división de los grandes mineros del mercado para apoyar ambas propuestas de la bifurcación, generando la ‘guerra de hashes’ que devino en la crisis de un mercado bajista acentuado hasta finales de abril 2019.

Craig, autoproclamado Satoshi Nakamoto, ha logrado la atención del mercado con su propuesta técnica más allá de sus controversias en torno al whitepaper de Bitcoin del cual reclamó los derechos de autor, por la mejora técnica de BSV al introducir escalabilidad en sus transacciones que entre otros logros, ha permitido grabar transacciones de hasta 1 GB de data en su blockchain.

Esto ha generado la atención de propios y extraños por la relevancia técnica que implica esta mejora, que ha logrado inclusive voltear la mirada de muchos mineros, que con BSV la semana pasada generaron poco más de $75,000 en fees.

Por si fuera poco, la velocidad de transacciones ha mejorado considerablemente y las recientes alianzas del equipo de desarrollo de BSV han permitido darle un mayor caso de usos que ha repercutido en su demanda y por supuesto en su precio, inclusive de los especuladores, al lograr en una sola jornada un 85 por ciento de profit.

Esto ha permitido que la popular trader y hermana del proponente de BSV, Lisa Edwards, haya proyectado exitosamente la escalera actual de BSV a través de sus acertados análisis en la red social Twitter.

Por ahora BSV ha permitido posicionarse dentro del top ten del mercado y mantiene profits cuando el resto del mercado entra en recesión, algo impensable hace un par de meses para el ecosistema cripto.

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