Irán considera a la criptomoneda de Telegram como una amenaza a su seguridad nacional

Telegram, la conocida plataforma de mensajería, ha comunicado en varias oportunidades su intención de crear una criptomoneda propia que sea capaz de competir con las monedas digitales más usadas del mercado. Sin embargo, no todos están felices con esta iniciativa, ya que consideran que este nuevo activo criptográfico puede ser un verdadero peligro; y en este grupo está Irán.

De acuerdo con Javad Javidnia, secretario del Grupo de Trabajo de Definición de Contenido Criminal del país, Irán considerará a cualquier cooperación con la emisión de la moneda como “una acción contra la seguridad nacional” de la República Islámica. El funcionario hizo un especial énfasis en que los casos que brinden apoyo se les “tratarán como una interrupción a la economía nacional”.

La aplicación de mensajería fue prohibida en Irán en abril del 2018, luego de una serie de protestas que la población del país organizó contra el gobierno debido a los problemas socioeconómicos por los que estaban atravesando, que supuestamente fueron orquestadas por Telegram. Por ello, para “proteger la seguridad nacional”, las autoridades decidieron prohibir la plataforma.

“Uno de los factores más importantes para prohibir Telegram fue la sensación de una seria amenaza económica de sus actividades, que desafortunadamente fue marginada y desatendida debido al alboroto en la atmósfera política del país”, añadió Javidnia, según reporta Bitcoin News.

La República iraní nunca ha tenido una relación muy amena con las criptomonedas. Sin embargo, luego de las sanciones económicas que la administración de Trump impuso sobre el país, Irán no tuvo más alternativa que adaptarse.

Pero esto no quiere decir que ahora el gobierno del país tenga una actitud positiva respecto al cifrado. Sí, reconoció a la minería como una industria y permitió la importación de equipos mineros, pero aún tiene fuertes reservas cuando se trata de criptomonedas descentralizadas como Bitcoin.

A pesar de esto, Irán quiere crear su propia moneda digital nacional, para seguir evadiendo las sanciones de Estados Unidos.

Podría parecer toda una contradicción que Irán no vea con buenos ojos a las criptomonedas pero, a la vez, quiera desarrollar una propia. Pues en realidad, no es tan extraño. Las autoridades del país dejaron en claro que no les agrada la idea de una moneda descentralizada.

La gran diferencia entre, por ejemplo, Bitcoin y la nueva moneda iraní, es que la última será centralizada, es decir que estará bajo el control del Estado. Irán quiere simular a los intentos del gobierno venezolano por crear una criptomoneda propia con el Petro.

Pero siguen considerando a las monedas digitales descentralizadas como un peligro potencial para su estabilidad económica. Lo mismo ocurre con Telegram y su criptomoneda, denominada Gram.